La policía se presentaba en el domicilio de Shehada Khalil Issa, de 69 años de edad, en la zona de North Hilss, donde encuentran el cuerpo sin vida de su hijo, Amir Issa, de 29 años de edad, en la parte exterior de la casa, donde también se encontraba el cuerpo sin vida de su madre y esposa del acusado en el interior de la vivienda. Según el acusado, tras encontrar el cuerpo de su esposa en el cuarto de baño, apuñalada, realiza el disparo a su hijo en defensa propia, porque le amenaza con un cuchillo. Sin embargo, los detectives no han encontrado ningún cuchillo en el lugar del crimen. Sigue abierta la investigación para esclarecer los hechos entorno al asesinato de la madre.
«El asesinato fue cometido debido a la orientación sexual de la víctima y debido a la percepción del acusado sobre el estatus de la asociación de la víctima con una persona y un grupo de ese estatus», explica el fiscal del distrito de Los Angeles en un comunicado, indicando que el padre había previamente amenazado con asesinar a su hijo por ser gay, motivo por el que Amir se encontraba en proceso de abandonar el hogar familiar.
«Todos los días me despierto con la sensación de que mi hermano o mi hermana o mi madre o mi padre me están literalmente controlando mientras duermo. No tengo ninguna voluntad. En el momento en que pierdo la consciencia siento como si le dijeran a la gente que me violara y abusara de mi y me hiciera sentir como si me gustara. Estaba ganando sobre 100 dólares a la semana cuando tenía 26 años y esto ha impactado negativamente en mi vida, vivir en dolor tras perder el empleo. Si hay un demonio o un espíritu maligno, creo sinceramente que se manifiesta en mi familia. Mi nombre es Príncipe Cristo. ¿Insultarme y controlarme os hace sentir mejor con vosotros mismos? No quiero estar relacionado con ninguna de estas personas… ni a sus familiares mirando y defendiendo este trato inhumano. Han robado literalmente mi cuenta bancaria, mentido a los tribunales y a los médicos para tratar de etiquetarme como un enfermo mental y han fracasado en su intento de encarcelarme y encerrarme falsamente. Mis médicos han certificado que no padezco ninguna enfermedad mental y los tribunales han limpiado mi buen nombre y no tengo ningún antecedente criminal. He pasado con éxito una verificación de antecedentes. Si hay alguna gente buena en este mundo, por favor, liberadme de esta esclavitud inhumana».
Este desgarrador texto era una de las últimas entradas que Amir Issa publicaba en su Facebook, meses después de haber publicado un vídeo en el que se le ve discutiendo acaloradamente con su padre y su madre sobre religión y en el que su padre le llama pervertido y le dice que debería ser castrado. El padre de Amir se enfrenta a una cadena perpetua si es declarado culpable de los cargos, cuya lectura está prevista para el 11 de abril.
Fuente: https://noticias.universogay.com/un-..._02042016.html