Tweet
Críticas a un alcalde transgénero de Estados Unidos por su vestimenta
Enviado Flick el 26 Julio 2009
El pasado noviembre recogíamos como Silverton, un pueblo de Oregón, elegía al transgénero Stu Rasmussen alcalde, convirtiéndole en la primera persona abiertamente transgénero que alcanzaba ese puesto en Estados Unidos. Rasmussen, de 60 años, se define a sí mismo como un varón heterosexual con apariencia de mujer. Rasmussen es ahora noticia por las quejas sobre el atuendo con el que se dirigió a un grupo de adolescentes en un reciente acto de la organización comunitaria Silverton Together: tacones altos, falda corta y un top que dejaba al aire sus hombros y parte del pecho y la espalda.
Dicha combinación viola, al parecer, el código de vestimenta municipal, que data de 2006. La queja ha sido formalmente planteada por Brenda Sturdevant, directora de Silverton Together. Para Sturdevant la vestimenta del alcalde les puso en una ”situación difícil”, dado que ellos siguen un código de vestimenta estricto e incluso envían a los jóvenes a cambiarse a sus casas si no visten adecuadamente. “Esperamos que nuestros líderes sigan las mismas directrices que exigimos a nuestros jóvenes”, ha dicho.
Rasmussen, sorprendido y contrariado por la denuncia, ha aprovechado para criticar el código de vestimenta municipal, argumentando sobre sí mismo que “los electores han demostrado sobradamente que la apariencia personal no es relevante a la hora de escoger a sus cargos municipales”. El alcalde ha explicado además que la vestimenta que lucía ese día era absolutamente apropiada a las cirscunstancias, dado el calor intenso que hacía.
Enviado Flick el 26 Julio 2009
El pasado noviembre recogíamos como Silverton, un pueblo de Oregón, elegía al transgénero Stu Rasmussen alcalde, convirtiéndole en la primera persona abiertamente transgénero que alcanzaba ese puesto en Estados Unidos. Rasmussen, de 60 años, se define a sí mismo como un varón heterosexual con apariencia de mujer. Rasmussen es ahora noticia por las quejas sobre el atuendo con el que se dirigió a un grupo de adolescentes en un reciente acto de la organización comunitaria Silverton Together: tacones altos, falda corta y un top que dejaba al aire sus hombros y parte del pecho y la espalda.
Dicha combinación viola, al parecer, el código de vestimenta municipal, que data de 2006. La queja ha sido formalmente planteada por Brenda Sturdevant, directora de Silverton Together. Para Sturdevant la vestimenta del alcalde les puso en una ”situación difícil”, dado que ellos siguen un código de vestimenta estricto e incluso envían a los jóvenes a cambiarse a sus casas si no visten adecuadamente. “Esperamos que nuestros líderes sigan las mismas directrices que exigimos a nuestros jóvenes”, ha dicho.
Rasmussen, sorprendido y contrariado por la denuncia, ha aprovechado para criticar el código de vestimenta municipal, argumentando sobre sí mismo que “los electores han demostrado sobradamente que la apariencia personal no es relevante a la hora de escoger a sus cargos municipales”. El alcalde ha explicado además que la vestimenta que lucía ese día era absolutamente apropiada a las cirscunstancias, dado el calor intenso que hacía.
