Escrito el 28-01-2009 por Raul Madrid
Según el diario Público, una asociación de personas intersexuales (conocidos antes por hermafroditas) se manifestó ante la sede de la ONU en Ginebra para pedir que se respeten y reconozcan sus derechos a la integridad física y a la dignidad humana. Después de la manifestación, la asociación entregó un informe a la Convención de Naciones Unidas para la Eliminación de la Discriminación de la Mujer (CEDAW), solicitando que no se permitan las operaciones sin consentimiento de la persona implicada.
La portavoz de la asociación, Daniela Truffer, ha explicado que a muchos niños intersexuales se les opera antes de cumplir los dos años. Esto significa que la decisión sobre la sexualidad del niño la toman los padres, cuando en realidad debería ser el niño el que, llegado el momento, tomara la decisión más acorde a sus sentimientos, a sus necesidades, incluso a su salud, puesto que se trata de una operación que puede acarrear dolor crónico o pérdida de sensibilidad genital, además de frecuentes problemas de salud. Lo más natural, según la Asociación, es que los padres enseñen a los niños que son diferentes hasta que pueda decidir por sí mismo.
Para evitar actuaciones precipitadas de los padres, basadas casi siempre en el miedo y el desconocimiento, la asociación propone un protocolo de actuación en los hospitales, con la supervisión de un médico o un psicólogo, que se encargue de aconsejar e informar a los padres y madres de las opciones posibles así como de los riesgos que pueden llevar consigo.
Nota: Las personas intersexuales nacen con características físicas femeninas y masculinas de modo simultáneo. Su problemática es distinta a la de los y las transexuales, cuyo sexo anatómico es claro desde el nacimiento. Si queréis indagar sobre este asunto, os recomiendo consultar el término ‘intersexualidad’ en la Wikipedia. En él encontraréis información y enlaces muy útiles para el que quiera profundizar en el tema.