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Fuente:notiese.org
OPINIÓN
Un pequeño abordaje trans a la Iniciativa de Sociedades de Convivencia
Hazel Gloria Davenport/NotieSe *
El impacto de la aprobación de la iniciativa de Ley de Sociedades de Convivencia en el Distrito Federal para los derechos de las personas transexuales o transgenéricas será inmediata, sobre todo en los procesos legales de cambio de nombre, posibles en esta ciudad a través de las modificaciones al articulo 135 del código civil capitalino.Dado que la transexualidad y el transgénero son vivencias ligadas a la identidad de la persona, existen muchas mujeres trans asumidas como lesbianas, pero que antes de iniciar sus procesos de transición contrajeron matrimonio con otras mujeres, en lo que aparentaba ser una relación heterosexual.Una vez asumida la identidad de mujer, en este caso lesbiana o bisexual e incluso después de la realización de vivencias y de modificaciones físicas a través de procesos hormonales y o quirúrgicos, la mujer trans continúa atada a una identidad oficial de origen masculino que incluye la relación legalizada con su pareja. Pese al acuerdo entre la pareja, de continuar la relación, los abogados suelen poner como un requisito legal para el proceso de cambio de nombre ante el registro civil, con base al articulo 135, el divorcio de la pareja.El argumento ha sido el siguiente: "Otorgar el cambio de nombre de hombre a mujer en un matrimonio, equivaldría al matrimonio de nombre entre dos mujeres".Asimismo, en el propio proyecto de Ley de Identidad de Género, presentado durante la legislatura pasada por el entonces diputado del PRD Inti Muñoz, presentaba algunos problemas en lo relativo al derecho de la persona transexual a su identidad y a su familia. El proyecto, apoyado por Humana, Nación Trans, desde la perspectiva de la posibilidad de modificarlo, fue analizado a fondo, sobre todo en lo relativo a la familia, por la escritora y videoasta trans Silvia Jiménez, vicepresidenta de la organización en proceso, quién en su momento hizo comentarios sobre la necesidad de dar certeza legal a los derechos de la persona transexual al acceso a la familia y a sus relaciones de pareja.La posibilidad de Sociedades de Convivencia permitirá a mujeres trans dar esta misma certeza a sus parejas, y a la continuación de su lucha legal por el acceso a la identidad sin tener que renunciar a la seguridad familiar por medio de un divorcio.Esta situación representa un reto que deberá ser analizado y resuelto a medida que el mismo proyecto legal evolucione. Por el momento se vislumbra como una posibilidad de dar continuidad a parejas y familias en las que una persona decide cambiar de sexo o de género.Una posibilidad hasta ahora imposible para todas aquellas mujeres transgenéricas o transexuales lesbianas o bisexuales, cuya única posibilidad de dar seguridad a sus parejas e hijas o hijos era un matrimonio legal y que han tenido que renunciar al cambio de nombre para no divorciarse.
OPINIÓN
Un pequeño abordaje trans a la Iniciativa de Sociedades de Convivencia
Hazel Gloria Davenport/NotieSe *
El impacto de la aprobación de la iniciativa de Ley de Sociedades de Convivencia en el Distrito Federal para los derechos de las personas transexuales o transgenéricas será inmediata, sobre todo en los procesos legales de cambio de nombre, posibles en esta ciudad a través de las modificaciones al articulo 135 del código civil capitalino.Dado que la transexualidad y el transgénero son vivencias ligadas a la identidad de la persona, existen muchas mujeres trans asumidas como lesbianas, pero que antes de iniciar sus procesos de transición contrajeron matrimonio con otras mujeres, en lo que aparentaba ser una relación heterosexual.Una vez asumida la identidad de mujer, en este caso lesbiana o bisexual e incluso después de la realización de vivencias y de modificaciones físicas a través de procesos hormonales y o quirúrgicos, la mujer trans continúa atada a una identidad oficial de origen masculino que incluye la relación legalizada con su pareja. Pese al acuerdo entre la pareja, de continuar la relación, los abogados suelen poner como un requisito legal para el proceso de cambio de nombre ante el registro civil, con base al articulo 135, el divorcio de la pareja.El argumento ha sido el siguiente: "Otorgar el cambio de nombre de hombre a mujer en un matrimonio, equivaldría al matrimonio de nombre entre dos mujeres".Asimismo, en el propio proyecto de Ley de Identidad de Género, presentado durante la legislatura pasada por el entonces diputado del PRD Inti Muñoz, presentaba algunos problemas en lo relativo al derecho de la persona transexual a su identidad y a su familia. El proyecto, apoyado por Humana, Nación Trans, desde la perspectiva de la posibilidad de modificarlo, fue analizado a fondo, sobre todo en lo relativo a la familia, por la escritora y videoasta trans Silvia Jiménez, vicepresidenta de la organización en proceso, quién en su momento hizo comentarios sobre la necesidad de dar certeza legal a los derechos de la persona transexual al acceso a la familia y a sus relaciones de pareja.La posibilidad de Sociedades de Convivencia permitirá a mujeres trans dar esta misma certeza a sus parejas, y a la continuación de su lucha legal por el acceso a la identidad sin tener que renunciar a la seguridad familiar por medio de un divorcio.Esta situación representa un reto que deberá ser analizado y resuelto a medida que el mismo proyecto legal evolucione. Por el momento se vislumbra como una posibilidad de dar continuidad a parejas y familias en las que una persona decide cambiar de sexo o de género.Una posibilidad hasta ahora imposible para todas aquellas mujeres transgenéricas o transexuales lesbianas o bisexuales, cuya única posibilidad de dar seguridad a sus parejas e hijas o hijos era un matrimonio legal y que han tenido que renunciar al cambio de nombre para no divorciarse.
