Por Luis M. Álvarez
Karen Ocamb se incorpora a Frontiers Magazine en 2002, desde entonces ha sabido amoldarse a cada nuevo editor de una publicación impresa fundada en 1981, pero los nuevos propietarios de la publicación consideran que es hora de cambiar la dirección de su revista. A sus 66 años de edad le comunican que le «dejan ir» por cuestiones empresariales, admitiendo después que la despiden porque es demasiado mayor.
Bobby Blair, director ejecutivo de Frontier Media, que engloba varias publicaciones, explica que, en base a la franja de sus anunciantes, los nuevos propietarios de la publicación han decidido centrarse en la denominada generación del milenio, los nacidos entre 1980 y 2000, para lo que van a enfocar todos sus esfuerzos en su versión digital. «Karen hizo un increíble trabajo y la echamos mucho de menos. Nos gustaría usar sus servicios en el futuro, de cuando en cuando, si a ella quisiera», explica Blair.
«Unas dos semanas antes ya estaba terminada, había rumores de que estaba en una lista para ser despedida. Pero ya que nadie de la compañía se había planteado eso como una posibilidad, me puse a un lado y seguí con mi trabajo», explica la periodista. Las noticias siempre había sido un ancla en la revista, no importa por cuantos cambios haya pasado Frontiers a lo largo de los años. Pero tenía mis sospechas acerca de cómo podría encajar. por eso, cuando me llamaron de vacaciones a para una reunión de cinco minutos, estaba bastante segura de que sabía lo que iba a pasar. No obstante, por muy intelectualmente preparada que estuviera, hay un peaje por dejarme ir tras una larga carrera de servicios a Frontier».
Bob Witeck, presidente de Witeck Communications, ha expresado su preocupación por el brusco despido de uno de los más respetados periodistas en los medios de comunicación LGTB: «He conocido a Karen durante décadas, y he trabajado con ella por mucho tiempo. La considero una de nuestras mejores trabajadoras, de las más reconocidas y apasionadas periodistas a la hora de informar y servir a la comunidad LGTB (…). Es duro entender las decisiones empresariales tomadas por Frontiers, o por qué su despido parece prudente, necesario o incluso rentable. No puedo creer que despedir a Karen les ayudará un ápice con sus lectores o sus anunciantes. Imagino que esto significa que van a publicar menos reportajes y que serán más superficiales en el futuro, lo que sólo degradaría más su producto con el tiempo».
Fuente: https://noticias.universogay.com/periodista-lesbiana-es-despedida-de-publicacion-lgtb-por-ser-demasiado-mayor__01042016.html