Mujeres africanas de entre 15 y 49 han sido víctimas de la mutilación genital femenina, una práctica que consiste en la extirpación parcial o total de los genitales “por motivos no médicos” y que provoca numerosos problemas de salud y en el parto a las mujeres.
La Fundación Amref Salud África subraya que esta práctica, “además de violar los derechos básicos de la mujer y privarla de tomar decisiones sobre su propia vida y su cuerpo, es muy perjudicial para la salud” y que ante el “alto” porcentaje de víctimas hay que trabajar en la sensibilización.
Complicidad de las mujeres de la comunidad
La mutilación genital femenina, añade, se realiza “con la complicidad de las mujeres de la comunidad, ya que se considera que el clítoris o los labios vaginales son antihigiénicos y que mediante la ablación se asegura la virginidad y la pureza de las chicas hasta el momento de su matrimonio”.
Actualmente, la mutilación genital femenina se produce en 29 países de África y Oriente Medio, aunque está prohibida en 24 Estados africanos. El último en incorporarse, en 2015, ha sido Nigeria, donde el índice de prevalencia nacional es del 25%, aunque los datos varían enormemente entre Estados.
La fundación también recuerda que, aunque es un paso necesario, “su prohibición legal no es suficiente para acabar la mutilación genital femenina, ya que se considera algo cultural y está intrincada en la mente de muchas mujeres y hombres africanos”. Recientemente el ministro de Asuntos Sociales de Sierra Leona, Moijua Kaikai, dijo que la ablación clitoriana es una práctica cultural que apoya el gobierno y no será prohibida en el país.
“Se relaciona con la feminidad, la transición adulta, la belleza o el matrimonio. Y también se practica para reducir la libido de la mujer y para evitar que así realice prácticas sexuales consideradas ilícitas”, concluye Fundación Amref Salud África.
Las tribus Maasai y Samburu, las que más lo practican
En las comunidades Maasai y Samburu de Kenia y Tanzania, donde más del 90% de las mujeres han sufrido la ablación genital durante el rito de paso a la edad adulta que tiene lugar en la pubertad, Amref Salud África realiza un rito de paso alternativo que obvia el momento del corte.
Así, el pasado 3 de diciembre, 300 niñas pasaron a ser consideradas mujeres a ojos de su comunidad sin haberlo sufrido. En los días previos, además, sensibilizó a sus padres, profesores y a los líderes locales sobre lo dañino de la mutilación, que además no presenta ningún beneficio para la salud de la mujer.
La mutilación genital femenina cuenta con la aprobación de muchas personas por ser una práctica cultural y por la falta de información que existe sobre sus efectos nocivos (al estar tan relacionada con el sexo, es un tema muy tabú entre muchos africanos), pero también hay otros miembros de las comunidades que la condenan y la repudian. Amref trabaja con esos miembros de la comunidad que no aprueban la ablación genital para que informen y sensibilicen a sus familiares, vecinos y amigos. Esperamos parar la mutilación genital femenina y convertirla en cosa del pasado.
Fuente: http://www.cascaraamarga.es/sociedad/56-sociedad/12787-el-92-de-las-mujeres-africanas-todavia-son-victimas-de-la-mutilacion-genital.html