El líder del PSC se desmelena en el programa 'Sálvame Deluxe'
Nadie está libre de prejuicios y encontrarse por sorpresa con un político de primera línea cerca de las dos de la madrugada en el programa Sábado Deluxe, uno de los más frívolos de la parrilla televisiva, es de esas cosas que hacen que el espectador medianamente curioso se quede pegado a la pantalla.
Es lo que ocurrió en la madrugada de este domingo cuando Miquel Iceta (56 años), secretario del Partido Socialista de Cataluña (PSC) desde julio de 2014, contestaba con la misma naturalidad sobre la marcha del pacto de su partido con Barcelona en Comú en el Ayuntamiento de Barcelona, que sobre sus gustos musicales o su condición sexual.
Iceta que siempre ha hablado muy claro sobre su homosexualidad, recordó junto al presentador del programa, Jorge Javier Vázquez, sus respectivas épocas de juventud en Barcelona cuando “los locales gay eran muy clandestinos”. Preguntado sobre si se subiría a una carroza en una fiesta del Día del Orgullo Gay, el político contestó con socarronería: “Ya lo he hecho.
Ahora no lo haría tanto, entre otras cosas porque ponen a unas personas que perdería…”, y acabó la frase con un significativo gesto que daba a entender que tanto cuerpo fornido podría hacer que se extraviara. Y cuando en respuesta a esta afirmación una de las periodistas presentes insinuó que un amigo gay le dice que "tal y como están las cosas le dan ganas de volver al armario", Iceta no dudó en responder rápidamente que “los armarios hay que quemarlos para que nadie pueda volver a ellos y sobre todo para que nadie se vea obligado a estar en ellos”.
En cualquier caso el momento más divertido fue ver cómo el político catalán disfrutaba con las canciones preferidas de su propia selección musical. Con Don’t stop me now, de Queen, como fondo, manifestó que fue el himno que necesitó para afrontar una campaña que sabía iba a ser dura de antemano. No pudo evitar gesticular apasionadamente mientras tarareaba Como una ola, de Rocío Jurado: “Un chorro de voz a quien vi una vez en un concierto en Sabadell y que para mí siempre será la gran Rocío”. Never gonna give you up, de Rick Astley, le transportó al recuerdo de un viaje en coche por Estados Unidos y cómo cantaba a gritos esa canción mientras recorría el país. Y sobre I will always love you, de Witney Houston, dijo: “A ver quién no ha visto cien veces El Guardaespaldas”.
"A mí me va la marcha"
Sincero y consciente de que su presencia en el programa de Telecinco no gustaba a algunos de sus camaradas de partido, desveló que de joven sus compañeros de curso tenían a Carolina de Mónaco como póster en sus habitaciones mientras él prefería a Elton John “porque era un mito gay”. Y no se cortó en decir alto y claro: “A mí me va la marcha”. Como tampoco rehuyó responder cuando le interrogaron sobre la fidelidad. Se confesó fiel, pero matizó que “quizá no al modo tradicional". "Lluis Reverter (otro político socialista que ocupó importantes cargos en el Gobierno en la década de los ochenta) me dijo hace tiempo que amar es querer querer. Eso significa que el amor es un sentimiento, pero también es una voluntad”.
Iceta no se lanzó a bailar por Freddy Mercury como en el arranque de la campaña de las Elecciones Catalanas de 2015 porque no le insistieron pero se le iban los pies tras la música y con su frescura fue capaz de descubrir la cara más amable de un político que no teme mostrarse tal cual es. Declaró que los pactos y las concesiones forman parte de la actual situación política, habló de Carme Chacón, amiga y compañera de partido recientemente fallecida, se declaró “el mejor entre lo que hay ahora mismo en Cataluña” y volvió a hacer patente que además de un profesional en lo suyo –le avalan 40 años de dedicación pública– es una persona dispuesta a decir en cualquier circunstancia “que me quiten lo bailao”.
Fuente: http://elpais.com/elpais/2017/05/07/...64_230233.html