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A pesar de que hay una grabación, consideran que no hay pruebas concluyentes
La juez Rosa María Sánchez Carretero considera que no hay vulneración de los derechos del profesor, a pesar de que ha escuchado las grabaciones de la directora del colegio concertado Calasancio Hijas de la Divina Pastora de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), en el que le decía: “Acepto tu persona por completo, te respeto por completo. Espero que algún día la Iglesia incluya a todo el mundo. Yo sé que si esto lo saben los padres puede ser un problema”. Y se relaciona directamente los prejuicios de los progenitores con el futuro del profesor, a pesar de que se trata de un centro concertado, y, por tanto, con dinero público: “No te puedo decir que la cosa vaya a quedar igual (…) Lo mismo no sucede absolutamente nada, que lo dudo, que no creo que… Pero te lo tenía que decir”, sigue la grabación. “Aquí hay padres que han traído a su hijo al centro porque es religioso, otros por el nivel académico o lo que sea, pero hay una parte que es por el nivel religioso y gente que es muy muy cerrada”.
Tras analizar el caso, la sentencia asegura que “no se aportan datos que permitan asegurar que tanto el cese y extinción del contrato de relevo como la no contratación del actor en un momento posterior obedecieran a razones ajenas a la finalización del contrato o la concurrencia de una candidata mejor preparada”.
Cuando la polémica saltó a la prensa, la dirección del centro decidió publicar en su web un comunicado en el que se indicaba que no se le había renovado “al considerar que el perfil pedagógico del profesor no se ajusta al proyecto educativo actual y futuro del centro”.
Publicado por Ociogay el 28 de mayo de 2014 en Actualidad, Actualidad 3, Derechos Humanos
La juez Rosa María Sánchez Carretero considera que no hay vulneración de los derechos del profesor, a pesar de que ha escuchado las grabaciones de la directora del colegio concertado Calasancio Hijas de la Divina Pastora de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), en el que le decía: “Acepto tu persona por completo, te respeto por completo. Espero que algún día la Iglesia incluya a todo el mundo. Yo sé que si esto lo saben los padres puede ser un problema”. Y se relaciona directamente los prejuicios de los progenitores con el futuro del profesor, a pesar de que se trata de un centro concertado, y, por tanto, con dinero público: “No te puedo decir que la cosa vaya a quedar igual (…) Lo mismo no sucede absolutamente nada, que lo dudo, que no creo que… Pero te lo tenía que decir”, sigue la grabación. “Aquí hay padres que han traído a su hijo al centro porque es religioso, otros por el nivel académico o lo que sea, pero hay una parte que es por el nivel religioso y gente que es muy muy cerrada”.
Tras analizar el caso, la sentencia asegura que “no se aportan datos que permitan asegurar que tanto el cese y extinción del contrato de relevo como la no contratación del actor en un momento posterior obedecieran a razones ajenas a la finalización del contrato o la concurrencia de una candidata mejor preparada”.
Cuando la polémica saltó a la prensa, la dirección del centro decidió publicar en su web un comunicado en el que se indicaba que no se le había renovado “al considerar que el perfil pedagógico del profesor no se ajusta al proyecto educativo actual y futuro del centro”.
Publicado por Ociogay el 28 de mayo de 2014 en Actualidad, Actualidad 3, Derechos Humanos
