Por miedo a una posible reacción negativa de los fans
Tras la salida del armario del jugador de baloncesto Jason Collins, trasciende una noticia publicada por “The Guardian” en la que se hacen eco del rumor que afirma que ocho futbolistas del fútbol británico han revelado su homosexualidad a sus compañeros y a Clarke Carlisle, presidente de la Asociación de Futbolistas Profesionales, quien habría revelado el hecho, pero temen decirlo públicamente por miedo a las posibles represalias de los aficionados, .
Este miedo evidencia que el fútbol británico sigue siendo un ambiente homofóbico. En Gran Bretaña, ningún futbolista profesional en activo ha salido del armario desde que Justin Fashanu lo hiciese en 1990. Dejó de jugar en 1994, pero se suicidó cuatro años más tarde, con 37 años de edad. Fashanu acabó por admitir que no estaba preparado para la reacción que siguió a su anuncio en público y su carrera como futbolista sufrió “graves daños”.
A principios de este año, Robbie Rogers, un futbolista americano del Leeds United, dejó el club por “consentimiento mutuo”, después de anunciar que era homosexual. Rogers, de 25 años, aseguró que su permanencia en el fútbol inglés tras confirmar su homosexualidad era “imposible”. La semana pasada se supo que había salido de Inglaterra y estaba entrenando con el equipo Los Angeles Galaxy en EE.UU. Todo el mundo está expectante por saber qué jugadores del fútbol británico son homosexuales, aunque parece complicado que alguno de estos ocho futbolistas se animen a anunciar públicamente su tendencia sexual.
Fuente:8 futbolistas de la Premier británica confiesan a sus compañeros que son gays, pero se niegan a hacerlo público