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Como ya había anunciado, la Junta de Andalucía (gobernada por una coalición PSOE-IU) utilizará el margen para completar temarios que la ley le permite para recuperar los contenidos de la asignatura de Educación para la Ciudadanía que el Gobierno del PP ha retirado (entre ellos, recordemos, los referidos a los prejuicios homófobos). Para ello, la Consejería de Educación ha elaborado dos órdenes, una para educación primaria y otra para secundaria, que trasladará a los centros educativos.
Según la consejera andaluza de Educación, Mar Moreno, se trata de “reponer el 100% de la asignatura“, reintroduciendo las referencias a la igualdad de género o la pluralidad social, familiar y religiosa. Se trata de una decisión perfectamente legal, dado que todas las comunidades autónomas disponen de margen para introducir hasta un 35% de contenidos propios en los temarios de las asignaturas. Recordemos que mientras se implementa la prometida supresión de Educación para la Ciudadanía y su sustitución por una nueva asignatura, llamada “Educación Cívica y Constitucional”, el Gobierno aprobaba en agosto un Real Decreto que fijaba sus contenidos para este nuevo curso. Desaparecía, por ejemplo, el párrafo del anterior Real Decreto 1631/2006, referido a “la valoración crítica de la división social y sexual del trabajo y de los prejuicios sociales racistas, xenófobos, antisemitas, sexistas y homófobos” por tratarse, según aseguró el Gobierno, de “cuestiones controvertidas y susceptibles de caer en el adoctrinamiento ideológico”. Curiosamente, se incluyen nuevos contenidos específicos que bien podrían ser calificados, con bastante más razón, de adoctrinamiento ideológico, como “el papel de la iniciativa económica privada en la generación de la riqueza y el fomento del espíritu emprendedor”.
Al haberse publicado la nueva norma en agosto, se han generado además algunos problemas de organización, como por ejemplo respecto a los nuevos manuales de texto. En Andalucía la consejería ha decidido que se emplearán los mismos que el curso pasado y simplemente se enviará a los centros escolares el material didáctico complementario necesario para los nuevos temas añadidos por el ministerio.
Educación para la Ciudadanía contó desde sus orígenes con el rechazo sistemático del PP y se convirtió, junto a la ley del aborto y la ley de matrimonio igualitario, en una de las medidas promovidas por el anterior Gobierno más odiadas tanto por la jerarquía católica como por los sectores sociales más conservadores, que promovieron campañas de “objeción de conciencia” que pese a chocar con las resoluciones del Tribunal Supremo contaron con el favor de algunos tribunales de justicia, como el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (uno de cuyos jueces, Enrique Gabaldón, es hijo del presidente de honor del ultraconservador Foro de la Familia, José Gabaldón). También dio lugar a esperpentos como el intento del Gobierno valenciano de devaluar la asignatura obligando a impartirla en inglés.
Fuente:Andalucía impartirá Educación para la Ciudadanía sin los recortes ideológicos impuestos por el Gobierno del PP
Según la consejera andaluza de Educación, Mar Moreno, se trata de “reponer el 100% de la asignatura“, reintroduciendo las referencias a la igualdad de género o la pluralidad social, familiar y religiosa. Se trata de una decisión perfectamente legal, dado que todas las comunidades autónomas disponen de margen para introducir hasta un 35% de contenidos propios en los temarios de las asignaturas. Recordemos que mientras se implementa la prometida supresión de Educación para la Ciudadanía y su sustitución por una nueva asignatura, llamada “Educación Cívica y Constitucional”, el Gobierno aprobaba en agosto un Real Decreto que fijaba sus contenidos para este nuevo curso. Desaparecía, por ejemplo, el párrafo del anterior Real Decreto 1631/2006, referido a “la valoración crítica de la división social y sexual del trabajo y de los prejuicios sociales racistas, xenófobos, antisemitas, sexistas y homófobos” por tratarse, según aseguró el Gobierno, de “cuestiones controvertidas y susceptibles de caer en el adoctrinamiento ideológico”. Curiosamente, se incluyen nuevos contenidos específicos que bien podrían ser calificados, con bastante más razón, de adoctrinamiento ideológico, como “el papel de la iniciativa económica privada en la generación de la riqueza y el fomento del espíritu emprendedor”.
Al haberse publicado la nueva norma en agosto, se han generado además algunos problemas de organización, como por ejemplo respecto a los nuevos manuales de texto. En Andalucía la consejería ha decidido que se emplearán los mismos que el curso pasado y simplemente se enviará a los centros escolares el material didáctico complementario necesario para los nuevos temas añadidos por el ministerio.
Educación para la Ciudadanía contó desde sus orígenes con el rechazo sistemático del PP y se convirtió, junto a la ley del aborto y la ley de matrimonio igualitario, en una de las medidas promovidas por el anterior Gobierno más odiadas tanto por la jerarquía católica como por los sectores sociales más conservadores, que promovieron campañas de “objeción de conciencia” que pese a chocar con las resoluciones del Tribunal Supremo contaron con el favor de algunos tribunales de justicia, como el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (uno de cuyos jueces, Enrique Gabaldón, es hijo del presidente de honor del ultraconservador Foro de la Familia, José Gabaldón). También dio lugar a esperpentos como el intento del Gobierno valenciano de devaluar la asignatura obligando a impartirla en inglés.
Fuente:Andalucía impartirá Educación para la Ciudadanía sin los recortes ideológicos impuestos por el Gobierno del PP
