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Eleonora Menicucci es la nueva ministra para la Política de las Mujeres del Brasil y no oculta su bisexualidad. La presión de los sectores más conservadores del país no ha conseguido impedir el nombramiento de esta mujer de 68 años, doctorada en Sociología, exguerrillera, divorciada y con dos abortos declarados a sus espaldas.
De hecho, el grupo de diputados evangélicos del Congreso exigió su dimisión incluso antes de tomar posesión de su cargo. Pero las críticas no parecen arredrar a Menicucci, veterana de la lucha contra la dictadura militar que sometió al Brasil entre 1964 y 1985, y que sufrió la cárcel y la tortura junto a la Presidenta Dilma Rousseff. Como comentó hace poco a una amiga suya, “imagínate si voy a tener miedo de defender mis ideas después de lo que pasé en manos de los militares”. Y sufrió mucho: cuatro años de cárcel, torturada durante 72 días, y lo sin duda más duro: “A mi hija de un año y ocho meses la torturaban ante mis ojos. [...] Fue ése el momento en el que entendí, con 26 años, la importancia de la maternidad en la mujer”.
Menicucci ha contado sin pelos en la lengua el descubrimiento de su bisexualidad en la cárcel, o de cómo la desilusión ante los valores machistas de la izquierda en que militó la encaminó hacia el feminismo. Madre de dos hijos, dice que es “abuela de una niña engendrada por inseminación artificial en la madre lesbiana”. De hecho, Menicucci ha declarado que la lucha por los derechos reproductivos y sexuales de las mujeres estará en el centro de su labor como ministra, y ello pese a que la liberalización del aborto sigue siendo un tema tabú en Brasil por la presión tanto de la iglesia católica como de las evangélicas. Esperemos que su nombramiento suponga un avance también para las minorías sexuales, en un momento en que el Brasil está dando numerosos pasos positivos.
Fuente: Nueva ministra brasileña, abiertamente bisexual
De hecho, el grupo de diputados evangélicos del Congreso exigió su dimisión incluso antes de tomar posesión de su cargo. Pero las críticas no parecen arredrar a Menicucci, veterana de la lucha contra la dictadura militar que sometió al Brasil entre 1964 y 1985, y que sufrió la cárcel y la tortura junto a la Presidenta Dilma Rousseff. Como comentó hace poco a una amiga suya, “imagínate si voy a tener miedo de defender mis ideas después de lo que pasé en manos de los militares”. Y sufrió mucho: cuatro años de cárcel, torturada durante 72 días, y lo sin duda más duro: “A mi hija de un año y ocho meses la torturaban ante mis ojos. [...] Fue ése el momento en el que entendí, con 26 años, la importancia de la maternidad en la mujer”.
Menicucci ha contado sin pelos en la lengua el descubrimiento de su bisexualidad en la cárcel, o de cómo la desilusión ante los valores machistas de la izquierda en que militó la encaminó hacia el feminismo. Madre de dos hijos, dice que es “abuela de una niña engendrada por inseminación artificial en la madre lesbiana”. De hecho, Menicucci ha declarado que la lucha por los derechos reproductivos y sexuales de las mujeres estará en el centro de su labor como ministra, y ello pese a que la liberalización del aborto sigue siendo un tema tabú en Brasil por la presión tanto de la iglesia católica como de las evangélicas. Esperemos que su nombramiento suponga un avance también para las minorías sexuales, en un momento en que el Brasil está dando numerosos pasos positivos.
Fuente: Nueva ministra brasileña, abiertamente bisexual
