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Estados Unidos: líder de una secta mata a un niño de cuatro años porque pensaba que era gay[
Terrible historia la sucedida en Durham (Carolina del Norte, Estados Unidos). Peter Lucas Moses, líder de una pequeña secta fundamentalista, está acusado de la muerte del pequeño Jadon Higganbothan, de cuatro años, al que habría disparado por creer que era homosexual. Higganbothan era hijo de una de las mujeres que convivían con Moses, que está también acusado de una segunda muerte.
Peter Lucas Moses, de 27 años, se hacía llamar a sí mismo “Lord” (“Señor”) y convivía en una casa con tres mujeres que se consideraban sus esposas y con nueve niños, todos hijos suyos (a diferencia de Jadon, que era hijo de una relación anterior de una de las mujeres) aunque el grupo intentaba atraer a más personas que también vivían en la casa. Como buen fundamentalista religioso, el líder de la secta consideraba la homosexualidad una aberración, y al parecer estaba seguro de que el pequeño Jadon era homosexual. Entre otros detalles, ha trascendido que antes de dispararle Moses estalló en cólera cuando se entero que el pequeño le había tocado las nalgas a otro niño.
La muerte del pequeño ocurrió en octubre del 2010, mientras que la de la Antoinetta Yvonne McKoy, la segunda víctima (una mujer de 28 años que se habría rebelado al control de Moses) sucedió en diciembre de 2010. Sin embargo, no fue hasta que otra de las mujeres que escapó de la secta y acudió a la policía, en febrero de este año, que se destapó lo sucedido.
Esta mujer tiene ahora la condición de testigo protegido, mientras que Moses se enfrenta a un posible condena a muerte por doble asesinato. Sus tres “esposas”, incluyendo a la madre del pequeño Jadon, están también procesadas. Dos de ellas, por cierto, están embarazadas en este momento. Los servicios sociales se han hecho cargo de los nueve niños.
Terrible historia la sucedida en Durham (Carolina del Norte, Estados Unidos). Peter Lucas Moses, líder de una pequeña secta fundamentalista, está acusado de la muerte del pequeño Jadon Higganbothan, de cuatro años, al que habría disparado por creer que era homosexual. Higganbothan era hijo de una de las mujeres que convivían con Moses, que está también acusado de una segunda muerte.
Peter Lucas Moses, de 27 años, se hacía llamar a sí mismo “Lord” (“Señor”) y convivía en una casa con tres mujeres que se consideraban sus esposas y con nueve niños, todos hijos suyos (a diferencia de Jadon, que era hijo de una relación anterior de una de las mujeres) aunque el grupo intentaba atraer a más personas que también vivían en la casa. Como buen fundamentalista religioso, el líder de la secta consideraba la homosexualidad una aberración, y al parecer estaba seguro de que el pequeño Jadon era homosexual. Entre otros detalles, ha trascendido que antes de dispararle Moses estalló en cólera cuando se entero que el pequeño le había tocado las nalgas a otro niño.
La muerte del pequeño ocurrió en octubre del 2010, mientras que la de la Antoinetta Yvonne McKoy, la segunda víctima (una mujer de 28 años que se habría rebelado al control de Moses) sucedió en diciembre de 2010. Sin embargo, no fue hasta que otra de las mujeres que escapó de la secta y acudió a la policía, en febrero de este año, que se destapó lo sucedido.
Esta mujer tiene ahora la condición de testigo protegido, mientras que Moses se enfrenta a un posible condena a muerte por doble asesinato. Sus tres “esposas”, incluyendo a la madre del pequeño Jadon, están también procesadas. Dos de ellas, por cierto, están embarazadas en este momento. Los servicios sociales se han hecho cargo de los nueve niños.
