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El nuevo código disciplinario militar castigará las expresiones homófobas
Enviado Flick el 01 junio 2011
El nuevo código disciplinario de las Fuerzas Armadas españolas, que sustituirá al vigente desde 1998, castigará por primera vez el uso por parte de los militares de expresiones homófobas. Así lo contempla el proyecto de ley aprobado el viernes por el Consejo de Ministros, y que inicia ahora su tramitación parlamentaria. Todo un símbolo de cambio en un entorno, el militar, de fuerte tradición machista.
En concreto, el proyecto de ley tipifica como falta leve (cuyo castigo va desde la reprensión hasta 10 días de suspensión de empleo y sueldo) “las expresiones o manifestaciones de desprecio por razón de nacimiento, origen racial o étnico, género, orientación sexual, convicciones, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social“. Se considerará falta grave (sancionable con arresto de hasta 30 días o suspensión de empleo y sueldo de hasta 20) todo acto que implique discriminación por alguno de los anteriores motivos, mientras que constituirá falta muy grave (lo que puede significar la expulsión del Ejército) la reiteración de los mismos. También será falta leve “la inexactitud en el cumplimiento de las medidas dirigidas a garantizar la igualdad entre hombre y mujer en las Fuerzas Armadas“.
En otro orden de cosas, el nuevo código hace por primera vez referencia a los símbolos oficiales de comunidades autónomas y administraciones locales, que gozarán de la misma protección que los estatales. La senyera catalana o la ikurriña vasca, por mencionar dos ejemplos, merecerán la misma consideración por parte de los militares que la bandera española.
Enviado Flick el 01 junio 2011
El nuevo código disciplinario de las Fuerzas Armadas españolas, que sustituirá al vigente desde 1998, castigará por primera vez el uso por parte de los militares de expresiones homófobas. Así lo contempla el proyecto de ley aprobado el viernes por el Consejo de Ministros, y que inicia ahora su tramitación parlamentaria. Todo un símbolo de cambio en un entorno, el militar, de fuerte tradición machista.
En concreto, el proyecto de ley tipifica como falta leve (cuyo castigo va desde la reprensión hasta 10 días de suspensión de empleo y sueldo) “las expresiones o manifestaciones de desprecio por razón de nacimiento, origen racial o étnico, género, orientación sexual, convicciones, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social“. Se considerará falta grave (sancionable con arresto de hasta 30 días o suspensión de empleo y sueldo de hasta 20) todo acto que implique discriminación por alguno de los anteriores motivos, mientras que constituirá falta muy grave (lo que puede significar la expulsión del Ejército) la reiteración de los mismos. También será falta leve “la inexactitud en el cumplimiento de las medidas dirigidas a garantizar la igualdad entre hombre y mujer en las Fuerzas Armadas“.
En otro orden de cosas, el nuevo código hace por primera vez referencia a los símbolos oficiales de comunidades autónomas y administraciones locales, que gozarán de la misma protección que los estatales. La senyera catalana o la ikurriña vasca, por mencionar dos ejemplos, merecerán la misma consideración por parte de los militares que la bandera española.
