Enviado Flick el 30 Junio 2010
Todo un ejemplo a seguir. El equipo inglés de rugby Castleford Tigers ha sido condenado a pagar una multa de 40.000 libras esterlinas por los insultos homófobos dirigidos por sus aficionados a Gareth Thomas, jugador de rugby abiertamente gay, actualmente enrolado en las filas de los Crusaders, un equipo galés, durante un partido de la Rugby Super League disputado en marzo.
La Rugby Super League está considerada como la competición europea de clubes de rugby de más alto nivel. En ella participan, en estos momentos, equipos de Inglaterra, Gales y Francia.
Un tribunal deportivo presidido por Rodney Grant ha considerado a los Tigers culpables de violar las normas de cortesía que rigen la competición debido a la conducta inapropiada de sus aficionados, que considera altamente perjudicial para los intereses del rugby. Gareth Thomas, a través de su representante, se ha mostrado satisfecho por la sanción. “No se trata de la multa, sino del reconocimiento de que una conducta ejercida por un pequeño sector de los aficionados de los Castleford Tigers no es aceptable en 2010. Desgraciadamente, lo que pasó en Castleford no puede ser ignorado”, ha manifestado.
El equipo multado está estudiando recurrir la sanción, que considera injusta.