Enviado Enoch el 28 Abril 2010
El candidato conservador Philip Lardner ha sido suspendido tras escribir en su página web que los homosexuales no son normales.
Tras otros comentarios homófobos por miembros del partido conservador británico -y que podrían haber reducido seriamente la intención de voto Tory entre la población LGTB británica- dicho partido ha retirado su apoyo a Lardner, aunque su nombre seguirá apareciendo en las papeletas electorales como candidato Tory, ya que sería demasiado tarde para eliminarlo de las listas.
Tras la derogación por los laboristas de la polémica Sección 28 -una medida introducida por el gobierno conservador de Margaret Thatcher que prohibía a organismos públi^Ss informar sobre la homosexualidad como un comportamiento aceptable- el líder Tory (David Cameron) llegó a pedir perdón por el apoyo a dicha cláusula, pero Lardner -maestro de primaria y antiguo soldado voluntario de la reserva- no opina lo mismo. En un texto en su página web titulado “La homosexualidad no es una ‘conducta normal’”, declaró apoyar el derecho de los padres a negarse a que sus hijos reciban información sobre homosexualidad ya que, en palabras textuales, “siempre apoyaré el derecho de los homosexuales a ser tratados (dentro del sentido común) con igualdad y respeto, y defenderé su derecho a escoger vivir como quieran en privado, pero no aceptaré que su comportamiento sea ‘normal’ o animaré a los niños a caer en ese estilo de vida.”
Este peculiar concepto de la igualdad y el respeto han hecho que sus comentarios -ya borrados- hayan sido calificados como “profundamente ofensivos e inaceptables”, “sin lugar en el partido Conservador moderno”, por el presidente de los Tories escoceses, Andrew Fulton. Según el Ministro por Europa laborista Chris Bryant, abiertamente gay, “estos comentarios son completamente inaceptables y revelan la insidiosa y arrogante verdad tras la campaña Tory.”
Las declaraciones de Lardner no han sido exactamente una sorpresa, pues ya fue suspendido en 2008 -y posteriormente readmitido- tras calificar al antiguo y racista líder de Rodesia Ian Smith como un héroe.