Las parejas homosexuales ofrecen un ambiente 'excelente' para criar niños
- Las familias con partos múltiples son las más autoritarias y estresadas
- Los hogares reconstituidos de familias anteriores presentan más desajustes
- La adopción crea obstáculos iniciales que suelen superarse con normalidad
- Las uniones homosexuales son equilibradas, pero temen el rechazo social
Efe | Bilbao
Actualizado viernes 19/03/2010 10:46 horas
Las parejas homosexuales ofrecen un ambiente familiar "excelente" para la crianza de niños porque fomentan la educación en valores como la tolerancia y destacan por su implicación de ambos en la educación, si bien temen por el rechazo social, según un estudio sobre las nuevas familias españolas.
El catedrático de Psicología Evolutiva de la Universidad del País Vasco Enrique Arranz ha colaborado con el profesor de la Universidad de Sevilla Alfredo Oliva en la elaboración de este estudio, pionero en España, que ha sido asesorado por la Universidad de Cambridge, sobre el desarrollo psicológico de niños y adolescentes en las nuevas estructuras familiares.
Cambio de patrones
Arranz ha dicho que "como consecuencia lógica del sistema socioeconómico" está desapareciendo la familia tradicional, en la que sólo las madres asumían la crianza de los hijos, ya que "ahora ellas trabajan, los padres no son siempre un hombre y una mujer, y cada vez más se crían hijos no biológicos".
La investigación descubre que el modelo tradicional "ni es el mejor para el desarrollo psicológico de los niños, ni se puede imponer", sino que los hijos que crecen con menores desajustes personales son los que "sufren menos momentos vitales estresantes y, en general, una mejor calidad de las relaciones familiares".
Familias de varias zonas españolas
La muestra se hizo mediante entrevistas con progenitores y niños correspondientes a 214 familias mayoritariamente de Andalucía y el País Vasco, además de algunas madrileñas y catalanas, pertenecientes a seis estructuras: 39 tradicionales, 39 monoparentales, 31 homoparentales (progenitores homosexuales), 31 reconstituidas después de haber tenido otras familias anteriores, 39 con hijos de partos múltiples y 35 adoptivas.
Arranz ha explicado que en la comparación de la calidad del entorno familiar han destacado la "excelente" evaluación que lograron las parejas de homosexuales, las cuales "mayoritariamente son de mujeres, con buena solvencia económica, grandes deseos de ser madres y que dedican mucho tiempo a su hijo", que suele ser único.
Equilibrados, pero con miedo al rechazo
Los niños criados en ese ambiente familiar son, según el estudio, "los más ajustados" psicológicamente, con un entorno "estimulante" que favorece su desarrollo y con menos conflictos trascendentales en su vida, pero estas familias "viven con miedo al rechazo social".
Al valorar la situación del entorno, también dieron buenos datos el modelo tradicional y las familias adoptivas inicialmente, ya que sus hijos han sido muy deseados, si bien éstas últimas "deben afrontar una serie de situaciones difíciles con la llegada del menor, especialmente en su fase de adaptación" y suelen acumular posteriormente más casos de problemas escolares.
Reparto de tareas más equitativo
Las parejas homosexuales y los padres adoptivos son quienes mejor se reparten las tareas de educación y los que más fomentan la transmisión de valores de democracia y diálogo a la hora de resolver conflictos, frente a las madres que han tenido partos múltiples, que reflejan "mayor estrés y autoritarismo".
Por contra, ha resaltado que son los hijos de familias reconstituidas los que presentan "más desajustes" debido a que "han experimentado un mayor número" de acontecimientos estresantes, que han vivido la ruptura de su anterior familia y después deben aprender a convivir con los nuevos miembros.
En realidad, "es donde hay mayor porcentaje de fracaso" en las relaciones y "los hijos sufren mayores desajustes psicológicos, con problemas que pueden perdurar hasta que son adultos".