Por Valentina
El parlamento lituano, a instancias de su presidenta Dalia Grybauskaite, quita de su controversial ley apartados homofóbicos
El Parlamento lituano decidirá si ser modifica una polémica ley que prohíbe, entre otras cosas, la promoción de la homosexualidad.
De acuerdo a la AFP, el parlamento nacional ha votado 58-4, con 25 abstenciones a favor de que se enmiende la ley. La ley prohíbe la “diseminación pública” de cualquier material que pueda ser visto como “promotor de la homosexualidad”.
En ese país también está prohibido hacer cualquier clase de mención acerca de la homosexualidad o la bisexualidad en las escuelas o en medios que sean accesibles a los jóvenes.
La ley lituana no es la única que prohíbe la mención de la homosexualidad en el medio escolar, en Reino Unido existe la Sección 28, que prohíbe estrictamente discutir sobre homosexualidad en el ambiente escolar.
De acuerdo a Amnistía Internacional, bajo la óptica de esta ley, podrían considerarse como “ofensas punibles” cualquier campaña en defensa de derechos de gays y lesbianas, conferencias sobre identidad de género y hasta información médica para personas LGBT, además de cualquier evento del Orgullo y Festivales de cine gay.
Pero durante esta semana, los legisladores lituanos aprobaron importantes cambios conservando la reprobación sobre abuso sexual de menores, relaciones sexuales entre menores y otro tipo de relaciones sexuales.
Un vocero de la presidenta lituana, Dalia Grybauskaite, -quien hizo el llamado a modificar la ley- dijo a la AFP: “Las cláusulas homofóbicas han sido removidas, la ley está dentro de los estándares europeos”.
La ley también prohíbe la mención de la bisexualidad y la poligamia, las imágenes de relaciones sexuales heterosexuales, imágenes de muertes o heridas graves, cuestiones paranormales, lenguaje inapropiado y malos hábitos de comida, aunque no especifica las sanciones que se recibirían por romper dicha ley.
Vladimir Simonko, cabeza de la Liga Gay Lituana, dijo que “bajo la óptica de esa legislación, cualquiera de nuestros actos públicos podrían ser objeto de prohibición”