17/09/2009 09:45:23
El juicio contra el indigente acusado de matar en 2008 a un amigo homosexual a puñaladas en la vivienda de éste último en Tremañes se celebrará hoy en la Sección Octava de la Audiencia Provincial de Asturias, con sede en Gijón.
La defensa, por su parte, pide la libre absolución al argumentar que los hechos ocurrieron con la eximente completa de legítima defensa y al afirmar que el procesado actuó bajo "intoxicación plena de alcohol y otras sustancias".
En todo caso, si se condenara a su cliente por un delito de homicidio, la defensa pedirá una pena de dos años y seis meses de prisión al concurrir las atenuantes de confesión de la infracción; del consumo de bebidas alcohólicas; de gran adicción al alcohol y a sustancias como pastillas tranquilizantes y hachís y con la eximente incompleta de legítima defensa.
Por su parte, el Ministerio Público solicita una pena de 15 años de prisión para Rafael G.S. por un delito de homicidio y once meses de prisión por un robo con violencia en grado de tentativa, al coger supuestamente el acusado la tarjeta de crédito de la víctima pero no poder hacer uso de ella.
Por su lado, la acusación particular, que ejerce en representación del hermano de la víctima, eleva la petición de condena a 20 años de cárcel, al considerar que hubo enseñamiento.
La víctima recibió ocho puñaladas, de las que el informe forense no determina si fue la primera la que le causó la muerte, además de diversos cortes. En este sentido, la acusación destaca en su escrito que el imputado apuñaló a la víctima hasta que se separó la hoja del cuchillo de la empuñadura.
Además, la Fiscalía pide una indemnización para el hermano del fallecido de 100.000 euros, la mitad de lo que solicita la acusación particular. También la acusación particular imputa al acusado un robo con violencia, pero en este caso consumado, por el que pide dos años de cárcel.
Supuestamente, el procesado robó una tarjeta de crédito de la víctima pero al primer cajero que fue estaba estropeado, tras lo que preguntó a unos policías dónde estaba el cajero de esa sucursal más próximo, Una vez allí, al conocer el código 'pin', el cajero se tragó la tarjeta, por lo que no pudo obtener el dinero.
Durante la vista de mañana está previsto que declaren el acusado, los agentes de la Policía que intervinieron en el caso, el forense que practicó la autopsia y la Policía Científica de Madrid, que lo hará por videoconferencia.
En cuanto a los hechos, ocurridos el 6 de enero de 2008, el acusado confesó a la Policía ser el autor de la muerte de Constantino Jesús Mesa Vega, de 59 años, con el que tenía amistad desde hacía unos ocho años y el cual le acogía esporádicamente en su casa.
En un principio se había especulado con que eran pareja, aunque esto quedó desmentido por el acusado, quien reconoció que sabía que la víctima era gay pero él no. El imputado no tenía domicilio fijo y solía pedir dinero en las puertas de las iglesias.
Según la Policía, en el piso se encontró el cuchillo de cocina que supuestamente fue utilizado para cometer el crimen. El acusado, quien llamó después del crimen a la Policía desde un bar, confesó haber matado a cuchilladas a su amigo tras una acalorada discusión, aunque el crimen pasó inadvertido para los vecinos del inmueble. Después no opuso resistencia y colaboró con la Policía.