El juez Calamita no se apea de sus tesis homófobas
- • Declara como imputado por retrasar la adopción de una niña por una lesbiana
NACHO PARA
MURCIA
El polémico juez de Murcia Fernando Ferrín Calamita no se baja del burro. Ayer, tras declarar como imputado ante el Tribunal Superior de Justicia de Murcia (TSJ), negó que hubiera retrasado de forma maliciosa la adopción de una menor, solicitado por la compañera sentimental de la madre biológica de la pequeña, y aún no resuelto dos años después. "Siempre actué conforme a derecho y buscando el bien de la niña. Solo me preocupaba el ambiente en el que iba a criarse", dijo el juez, suspendido cautelarmente de sus funciones y de baja por depresión. "Doy las gracias a todos. Todo esto ha servido para que esté más tiempo con mi familia", ironizó Calamita, como dejando caer que su familia sí era una familia adecuada y normal.
En su declaración ante el juez instructor, Manuel Abadía, Ferrín Calamita se puso el traje de víctima y adujo que José Luis Mazón, el abogado de la pareja de lesbianas que forzaron su inhabilitación temporal, "sí que ha actuado de forma maliciosa". Mazón insistió en que el imputado retrasó el expediente de sus clientas debido a sus creencias religiosas: "Lo normal es que la adopción se conceda en dos meses. Cuando presentamos la querella, había pasado un año y medio, y Ferrín Calamita, movido por su fanatismo religioso y no por la ley, seguía buscando incluso la forma de arrebatar la menor a su propia madre biológica".
Tras la declaración como imputado del magistrado, el fiscal y el defensor podrían solicitar la práctica de nuevas diligencias, que también pueden ser propuestas por el instructor. "Lo que yo espero es ir a juicio. Y si no se adopta esa medida, recurriré", adelantó Mazón. Calamita declaró finalmente después de que un médico psiquiatra informara a la Sala de que, pese a no haber superado totalmente el cuadro clínico por el que estaba de baja, se encontraba en condiciones hacerlo.
EXPRESIONES EXTRAVAGANTES
El pasado mes de marzo, el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) impuso una multa de 600 euros al juez de Murcia por usar "expresiones extravagantes" en otro auto en el que denegó la custodia de dos hijas a una madre por su supuesta homosexualidad. He aquí un extracto: "¿No es un derecho del menor el de ser insertado en una familia normal, compuesta por dos personas de distinto sexo? ¿No es alta la probabilidad, en caso contrario, de que sea homosexual imitando el patrón que ha vivido en sus años fundamentales para la formación de su personalidad? ¿Por qué la condición homosexual perjudica a los hijos? Pues porque los hijos tiene derecho a un padre y a una madre, no a dos madres o a dos padres. Los más prestigiosos especialistas así lo determinan. No hace falta siquiera para ello ser especialista: el sentido común (que a veces es el menos común de los sentidos) así lo dice. El hombre y la mujer son complementarios entre sí. Dos mujeres o dos hombres, no".
Calamita, padre de ocho hijos, católico y supuestamente afín a las ideas del Opus Dei, ya saltó a las páginas de los periódicos en 1987, cuando mandó detener en la playa a una chica en toples y a otra desnuda porque se sintió "faltado al respeto" al verlas. Por entonces tenía 29 años y era juez de Chiclana (Cádiz). La Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (FELGTB) le otorgó ayer el premio-castigo Látigo personal "por su desprecio a la homosexualidad".