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Lo de Rusia es descorazonador. En lo personal me da mucha pena la población rusa arrastrada a una guerra injusta y peligrosa por un presidente inhumano que, además, en su cruzada personal contra el movimiento LGTB, ha aprobado una de las leyes más duras para el colectivo .
La Duma Estatal, Cámara Baja del Parlamento ruso, ya había aprobado hace unos años la Ley contra la «propaganda homosexual», que es básicamente la prohibición de que los niños recibieran cualquier tipo de información, cuento, película o anuncio publicitario donde se sugiriera la homosexualidad.
Ahora el gobierno ha ido aún más lejos. La ley se ha extendido también a la población adulta y a internet. Esta nueva normativa, en comparación con la que ya fue aprobada en junio de 2013, extenderá la censura a Internet, a los medios de comunicación en su conjunto, a la literatura, a las plataformas audiovisuales, al cine y a la publicidad.
¿A qué equivale esto? A que las series, películas y libros donde aparezca un personaje lésbico, gay, bisexual o trans estarán prohibidos. A que revistas digitales como Oveja Rosa no podrán leerse en Rusia (y sí, tenemos lectores rusos), a que no podrá haber ningún anuncio, a que ningún personaje público podrá siquiera hablar de nada LGTB, a que ni siquiera en el telediario podremos ver una noticia relacionada.
Rusia pretende destruir y atemorizar a la población LGTB llevándolos al extremo de la invisibilidad.
Según el presidente de la Duma, Viacheslav Volodin, «debemos proteger a nuestros ciudadanos y a Rusia del deterioro y de la extinción, de las tinieblas extendidas por Estados Unidos y los Estados europeos». Por su parte, el diputado Piotr Tolstói dijo que «la propaganda LGTBI se ha convertido en un arma contra los fundamentos, valores y tradiciones de Rusia». «Es un asesino silencioso y de sangre fría que destruye las almas».
Recordemos que en esta guerra ideológica, Rusia acaba de condenar a 9 años de cárcel a la estrella de la liga femenina de baloncesto en Estados Unidos, Brittney Griner, abiertamente lesbiana, casada con una mujer. La deportista fue sorprendida en el aeropuerto de Moscú con un simple vapeador con aceite e cannabis, para tratar el dolor de una lesión. Y eso fue suficiente para semejante y brutal castigo.
Fuente:https://ovejarosa.com/rusia-prohibe-...omosexualidad/
