MADRID, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
La obra dramática 'Bent', de Martin Sherman, que llegará al Nuevo Teatro Alcalá de Madrid el próximo 13 de abril, recuerda que en el holocausto también hubo homosexualidad. Ambientada en el Berlín de los años 30, el texto describe una historia de amor en el interior de un campo de concentración nazi durante la Segunda Guerra mundial.
El montaje de la obra lleva al espectador hacia almas despojadas que descubren en el amor una forma de libertad y rebelión. Los detenidos homosexuales, marcados con un triángulo rosa y a los que se les ha arrebatado todo derecho, luchan por no morir ni enloquecer.
LA HUIDA
'Bent', protagonizada por Luis Callejo, Juan Sin Miedo y Nacho Guerreros, presenta en la primera parte a Greta, la estrella de uno de los locales con más ambiente que enseña al público la noche berlinesa en un lugar lugar lleno de gays, lesbianas y muchos otros heterosexuales con ganas de juerga. Max, un joven atractivo, le echa una mirada a un soldado rubio, enseguida se van a la parte de atrás a dar rienda suelta a sus deseos, para terminar en casa de Max.
Lo que estos personajes no saben es que ésa es la llamada 'Noche de los Cristales Rotos', en la que Hitler ordena acabar con todos los judíos, así como los "pervertidos" homosexuales que están por todas partes. La Gestapo está buscando a todos los gays de la ciudad con la orden de acabar con ellos, incluyendo a todos los que pudieran tener alguna relación con los nazis.
Dos nazis irrumpen en casa de Max, que vive con su novio Rudy, un bailarín que actúa en el Club de Greta, y que empieza a estar un poco harto de que su compañero le engañe. Los soldados asesinan al chico rubio mientras Max y Rudy logran escapar. A partir de entonces, todo será una huida interminable, con la Gestapo a sus espaldas como tantos otros fugitivos.
"ESTO NO ESTA PASANDO"
Una noche la pareja es capturada y conducida en un tren al campo de concentración de Dachau. Rudy concentra las iras de los nazis que van dentro, quienes le propinan una bestial paliza, obligando a Max a matarle si no quiere ser el siguiente. "Esto no está pasando", es la frase con la que intenta despertar de esta pesadilla.
Después de este terrible episodio, comienza la segunda parte en la que Max conoce a Horst, otro homosexual que lo ha presenciado todo y que le aconseja que sólo piense en sí mismo si quiere sobrevivir. Cuando llegan a Dachau, Max dice ser judío y recibe una estrella amarilla identificativa, porque los homosexuales están en el escalón más bajo dentro del campo de concentración. Por el contrario, Horst recibe un triángulo rosa, que le identifica como gay, ya que Horst es más reivindicativo.
Max no quiere volverse loco por el trabajo que le asignan en el campo, trasladar un montón de pesadas piedras de un extremo a otro del patio, y una vez acabado, volverlas a poner en el sitio original. Así durante horas y horas, días y días. Como no quiere volverse loco y se puede permitir sobornar a los guardias por un dinero que guardaba, les pide que manden a alguien para ayudarle, y consigue que sea Horst.
FORMAS DE ENTENDERSE
Día a día se va creando una amistad entre ellos, que llegará a algo más. No pueden tocarse, porque hay guardias vigilando por todas partes, pero poco a poco irán ideando una forma de entenderse sin decir una palabra. Max y Horst sueñan despiertos que están en un lugar mucho más acogedor, donde pueden besarse y tocarse sin que nadie les llame la atención.
En definitiva, la obra cuenta una historia de amor, de encuentros y desencuentros mostrando cómo la vida humana pugna por sobrevivir sobre todas las cosas, llevada a sus limites mas intolerables.