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Dos lesbianas, 9 meses y una nueva vida
Somos Núria y Luisa, dos mujeres lesbianas que compartimos nuestra vida desde hace 3 años y que nos casamos el 9 de Julio de 2006. Quisimos aprovechar la visita del Papa Benedicto XVI en el V Encuentro Mundial de las Familias para reivindicar con nuestra boda que existen otros modelos de familia. Desde hace unos meses hemos tomado la decisión de aumentar nuestra familia con una hija/o y a través de este blog "mamymama" queremos contar nuestra experiencia.
Empezamos!!!!!
Lo primero fue decidir si lo hacíamos por la sanidad pública o a través de un centro privado. Hablamos con amigas que ya habían pasado por el proceso, lo valoramos según sus experiencias y decidimos intentarlo por la sanidad pública. Núria se acercó a su médico de cabecera, podríamos decir que es el médico de la familia, el de toda la vida. Le dijo "soy lesbiana y mi mujer y yo nos estamos planteando empezar el proceso de inseminación artificial para tener un hijo o una hija", digamos que al hombre le empezó a caer una gota de sudor lentamente por la cara y le contestó que no sabía que teníamos que hacer, que lo iba a averiguar. Núria le planteó que por una cuestión lógica le debería derivar al servicio de planificación familiar y eso fue lo que hizo el buen hombre. La cita era para tres meses después.
Núria es portadora del virus de la hepatitis C y desde hace años le hacen controles periódicos en el Hospital La Fe. En la última revisión fuimos las dos juntas porque queríamos preguntarle de qué manera podía afectar la hepatitis C en el proceso. Después de la consulta de rutina, le dijimos a la doctora que estábamos casadas y que queríamos tener un hijo o hija y que si nos recomendaba hacerlo por la sanidad pública. Después de unos segundos mirándonos fíjamente y sin pestañear, nos lo desaconsejó porque una de las exigencias de la sanidad pública en una mujer portadora del virus de la hepatitis C es que se someta previamente al tratamiento contra la hepatitis, lo cual retrasaría mucho el proceso además del riesgo que supone el propio tratamiento para la salud de Núria. Ese día habían dos estudiantes de medicina en su primer día de prácticas, supongo que sería una experiencia interesante.
Esta opinión de la doctora nos hizo replantearnos la situación de la sanidad pública y contactamos con el IVI. Luisa había conocido a Juana Crespo, la directora del centro, en las I Jornadas de políticas lésbicas de la FELGT en el año 2003. Éramos conscientes de que iba a ser mucho más caro pero nos generaba más confianza, además una chica que conocemos nos recomendó que ella personalmente nos llevara el proceso.
Les envíamos un mail explicándoles la situación y la posibilidad de que la doctora Crespo personalmente llevara nuestro proceso. Nos contestaron enseguida pidiendo que les enviáramos por mail un estudio serológico de hepatitis y sifilis además de la carga viral, luego nos pidieron un informe de la doctora de La Fe sobre el estado de salud de Núria. En todo esto han pasado unos meses y en diciembre nos dijeron que en enero contactarían con nosotras.
Ayer nos enviaron un mail diciéndonos que el hepatólogo del IVI ha visto nuestros informes y ahora nos piden un análisis en el tercer día de la regla de estradiol, lh, fsh y prolactina además de una analítica preoperatoria. Nos han dicho que cuando se haga el análisis tiene que empezar a tomar Neogynona que son unas pastillas anticonceptivas, una al día y la primera visita en el IVI será entre el día 16 y 22 de la toma de las pastillas.
Somos Núria y Luisa, dos mujeres lesbianas que compartimos nuestra vida desde hace 3 años y que nos casamos el 9 de Julio de 2006. Quisimos aprovechar la visita del Papa Benedicto XVI en el V Encuentro Mundial de las Familias para reivindicar con nuestra boda que existen otros modelos de familia. Desde hace unos meses hemos tomado la decisión de aumentar nuestra familia con una hija/o y a través de este blog "mamymama" queremos contar nuestra experiencia.
Empezamos!!!!!
Lo primero fue decidir si lo hacíamos por la sanidad pública o a través de un centro privado. Hablamos con amigas que ya habían pasado por el proceso, lo valoramos según sus experiencias y decidimos intentarlo por la sanidad pública. Núria se acercó a su médico de cabecera, podríamos decir que es el médico de la familia, el de toda la vida. Le dijo "soy lesbiana y mi mujer y yo nos estamos planteando empezar el proceso de inseminación artificial para tener un hijo o una hija", digamos que al hombre le empezó a caer una gota de sudor lentamente por la cara y le contestó que no sabía que teníamos que hacer, que lo iba a averiguar. Núria le planteó que por una cuestión lógica le debería derivar al servicio de planificación familiar y eso fue lo que hizo el buen hombre. La cita era para tres meses después.
Núria es portadora del virus de la hepatitis C y desde hace años le hacen controles periódicos en el Hospital La Fe. En la última revisión fuimos las dos juntas porque queríamos preguntarle de qué manera podía afectar la hepatitis C en el proceso. Después de la consulta de rutina, le dijimos a la doctora que estábamos casadas y que queríamos tener un hijo o hija y que si nos recomendaba hacerlo por la sanidad pública. Después de unos segundos mirándonos fíjamente y sin pestañear, nos lo desaconsejó porque una de las exigencias de la sanidad pública en una mujer portadora del virus de la hepatitis C es que se someta previamente al tratamiento contra la hepatitis, lo cual retrasaría mucho el proceso además del riesgo que supone el propio tratamiento para la salud de Núria. Ese día habían dos estudiantes de medicina en su primer día de prácticas, supongo que sería una experiencia interesante.
Esta opinión de la doctora nos hizo replantearnos la situación de la sanidad pública y contactamos con el IVI. Luisa había conocido a Juana Crespo, la directora del centro, en las I Jornadas de políticas lésbicas de la FELGT en el año 2003. Éramos conscientes de que iba a ser mucho más caro pero nos generaba más confianza, además una chica que conocemos nos recomendó que ella personalmente nos llevara el proceso.
Les envíamos un mail explicándoles la situación y la posibilidad de que la doctora Crespo personalmente llevara nuestro proceso. Nos contestaron enseguida pidiendo que les enviáramos por mail un estudio serológico de hepatitis y sifilis además de la carga viral, luego nos pidieron un informe de la doctora de La Fe sobre el estado de salud de Núria. En todo esto han pasado unos meses y en diciembre nos dijeron que en enero contactarían con nosotras.
Ayer nos enviaron un mail diciéndonos que el hepatólogo del IVI ha visto nuestros informes y ahora nos piden un análisis en el tercer día de la regla de estradiol, lh, fsh y prolactina además de una analítica preoperatoria. Nos han dicho que cuando se haga el análisis tiene que empezar a tomar Neogynona que son unas pastillas anticonceptivas, una al día y la primera visita en el IVI será entre el día 16 y 22 de la toma de las pastillas.
