Canadá prohíbe a los homosexuales que hayan tenido relaciones donar órganos
- El Ejecutivo dice que simplemente ha regulado requisitos basados en prácticas de riesgo
TORONTO.- El Gobierno canadiense, liderado por el conservador Stephen Harper, ha prohibido la donación de órganos a hombres que hayan mantenido una relación homosexual en los cinco años anteriores; una medida que ha sido duramente criticada por la oposición.
"El Gobierno muestra una vez más que actúa a hurtadillas", ha señalado Robert Thibault, portavoz del Partido Liberal, quien denuncia que la prohibición se ha puesto en marcha sin haberse anunciado oficialmente. Según parece, tan sólo fueron informados algunos medios de comunicación a través de correo electrónico una semana después de la adopción de la medida.
El Ejecutivo de este país ha negado que haya prohibido a los homosexuales donar órganos. Argumenta que simplemente ha regulado una serie de requisitos basados en prácticas de riesgo y no en el estilo de vida del donante. Precisan que un hombre homosexual que "haya practicado abstinencia durante los cinco años anteriores sería aceptable" como donante.
El Gobierno canadiense modificó su reglamento sobre la donación de órganos al final del año pasado a través de una directiva del Ministerio de Sanidad que afirma que los hombres que hayan mantenido al menos una relación homosexual durante ese periodo presentan "un factor de riesgo" de transmisión de enfermedad infecciosa.
Según la norma, tanto los varones gays sexualmente activos, como los usuarios de drogas intravenosas o los individuos que hayan estado recientemente en prisión, entre otros, se consideran inapropiados para donar sus órganos.
Varios especialistas consultados por la cadena pública canadiense CBC han indicado no haber sido informados de la puesta en marcha de esta normativa que podría limitar el número de donaciones de órganos en Canadá.
'Una reglamentación sin base científica'
En España, según explican fuentes de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), los criterios que se siguen para evaluar a un posible donante son estrictamente de tipo médico. Antes de realizar la extracción de los órganos, se realiza una evaluación y una analítica completa para comprobar que la persona no padece una enfermedad infecciosa.
Con el objetivo de descartar que la persona hubiera contraído alguna dolencia infecciosa recientemente que aún no sea detectable en los análisis (lo que se denomina periodo ventana) se sigue un protocolo para tratar de detectar posibles factores de riesgo.
"Se habla con la familia para evaluar conductas de riesgo, como el hecho de haber usado drogas intravenosas, haber tenido relaciones sexuales con múltiples parejas en los últimos meses o una relación con una persona infectada con VIH. Y en caso de sospecha, se informa al equipo extractor y receptor", explica Rafael Matesanz, coordinador de la ONT. "Pero sólo se tiene en cuenta si la persona ha mantenido una conducta de riesgo, en ningún caso se valora su condición sexual", remarca Matesanz.
"Estoy sorprendido por la reglamentación canadiense porque carece de base científica", comenta este experto. "Además, tener en cuenta los cinco años anteriores a la donación no tiene ningún sentido porque el periodo ventana dura tan sólo unos meses", concluye.
Comentario