El nuevo proyecto de uniones civiles en Italia reemplazará al anterior que fuera objeto de acaloradas discusiones en la escena social y política del país.
El nuevo proyecto se llama CUS - Contrato de unión solidaria (Contratti di unione solidale) y viene a reemplazar a la propuesta anterior conocida como DICO (Diritti di Convivenza) que naufragara luego de una fuerte oposición de la derecha y la iglesia Católica.
Un nuevo texto sobre el concubinato ha sido presentado a mediados de julio por el diputado Cesare Salvi –presidente de la Comisión Jurídica del Senado Italiano– y está en proceso de deliberación por el cuerpo.
Según este documento, que les asegura las uniones civiles tanto a homosexuales como a heterosexuales y que podrán ser asentadas mediante una declaración conjunta certificada por un notario, concederá a las parejas una serie de derechos y ventajas similares a las del matrimonio.
Con el anterior proyecto (DICO) la oposición de centro derecha y la jerarquía católica rechazaron el principio mismo de este tipo de contratos, pero de cara a esta nueva propuesta es que el diputado Franco Grillini –presidente honorario de la asociación ArciGay–, favorablemente comentó: «es una ocasión que no debe perderse. Deseemos que su tratamiento avance rápidamente en el Senado».