Tweet
Detenidos 10 dueños de 'sex-shops' por vender un estimulante prohibido
La Guardia Civil hace una macrorredada en la capital, Getafe, Galapagar y Móstoles
F. JAVIER BARROSO - Madrid - 07/07/2007
Una droga ilegal y hasta ahora poco conocida, el poppers, corría por saunas y sex-shops de Madrid y Móstoles. La Guardia Civil hizo ayer una macrorredada en medio centenar de establecimientos para incautarse de este potente estimulante que es inhalado durante las relaciones sexuales para aumentar el placer. Los agentes detuvieron a 10 personas y también registraron dos naves industriales en Galapagar y Getafe, desde las que se distribuía el estupefaciente.
El poppers es nitrato de amilo, una sustancia volátil e inflamable que, de ingerirse, puede resultar mortal. Sus efectos se consiguen a través de la inhalación y se vende en pequeños botes de unos 15 mililitros, cuyo precio oscila entre los 15 y los 20 euros. Esta droga produce estimulación y vasodilatación. A los pocos segundos de ser respirada, se produce una fuerte sensación de euforia, de ligereza y de desinhibición sexual. Como los efectos desaparecen muy rápidamente, después llega la depresión y el agotamiento. Se emplea por sus efectos durante el acto sexual, ya que incrementa el orgasmo y relaja los músculos anales. Puede producir la pérdida de la erección. Entre sus efectos adversos figuran el enrojecimiento de la cara y del cuello, dolores de cabeza, náuseas y vómitos, taquicardia e hipotensión. Crea gran tolerancia y dependencia física.
La operación de ayer es la primera que se desarrolla en la región contra este tipo de droga, según fuentes judiciales. La llevó a cabo el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil en colaboración con la Policía Municipal de la capital. Las investigaciones comenzaron hace un año y medio y los agentes han necesitado este tiempo para identificar a todos los proveedores y los puntos de distribución, sobre todo saunas y sex-shops. También necesitaron informes de la Dirección General de Farmacia para demostrar que se trata de una sustancia perjudicial para la salud.
La zona de Chueca fue una de las más registradas. Los agentes, apoyados por efectivos de la Policía Judicial, entraron en establecimientos de las calles de la Montera, Barco y Mejía Lequerica, según fuentes del caso. En la mayoría de los lugares, los agentes levantaron actas de incautación del producto. En los locales donde había mayor abundancia de botes de poppers se detuvo a los encargados o los dueños de las saunas y los sex-shops. Diez detenidos en total. Fueron trasladados a la Comandancia de la Guardia Civil en Tres Cantos, excepto los arrestados en la nave de Getafe. "En algunos sex-shops hemos encontrado uno o dos botes muy bien escondidos, mientras que en otros locales se ha incautado bastante cantidad", señalaron fuentes judiciales.
Los investigadores tenían previsto hacer las detenciones antes de la celebración del Orgullo Gay, organizado el pasado fin de semana, pero decidieron aplazarlo ante la avalancha de visitantes que había en la capital. En esas fechas, muchos locales aumentaron las existencias de poppers, ya que es un producto muy solicitado en determinadas prácticas sexuales.
Un centenar de agentes
Un juzgado de Collado Villalba dio los permisos para que los agentes entraran en los distintos establecimientos y, en especial, en las dos naves industriales. En la redada intervino cerca de un centenar de agentes, ya que en algunos municipios, como en Móstoles, también participaron policías locales.
Los arrestados serán acusados de un delito contra la salud pública, ya que supuestamente han vendido un estupefaciente peligroso para las personas. Fuentes judiciales indicaron que la mayoría de los detenidos pasarán hoy a disposición del titular del juzgado de guardia. Será éste quien decidirá si ingresan en prisión o son puestos en libertad.
La Guardia Civil hace una macrorredada en la capital, Getafe, Galapagar y Móstoles
F. JAVIER BARROSO - Madrid - 07/07/2007
Una droga ilegal y hasta ahora poco conocida, el poppers, corría por saunas y sex-shops de Madrid y Móstoles. La Guardia Civil hizo ayer una macrorredada en medio centenar de establecimientos para incautarse de este potente estimulante que es inhalado durante las relaciones sexuales para aumentar el placer. Los agentes detuvieron a 10 personas y también registraron dos naves industriales en Galapagar y Getafe, desde las que se distribuía el estupefaciente.
El poppers es nitrato de amilo, una sustancia volátil e inflamable que, de ingerirse, puede resultar mortal. Sus efectos se consiguen a través de la inhalación y se vende en pequeños botes de unos 15 mililitros, cuyo precio oscila entre los 15 y los 20 euros. Esta droga produce estimulación y vasodilatación. A los pocos segundos de ser respirada, se produce una fuerte sensación de euforia, de ligereza y de desinhibición sexual. Como los efectos desaparecen muy rápidamente, después llega la depresión y el agotamiento. Se emplea por sus efectos durante el acto sexual, ya que incrementa el orgasmo y relaja los músculos anales. Puede producir la pérdida de la erección. Entre sus efectos adversos figuran el enrojecimiento de la cara y del cuello, dolores de cabeza, náuseas y vómitos, taquicardia e hipotensión. Crea gran tolerancia y dependencia física.
La operación de ayer es la primera que se desarrolla en la región contra este tipo de droga, según fuentes judiciales. La llevó a cabo el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil en colaboración con la Policía Municipal de la capital. Las investigaciones comenzaron hace un año y medio y los agentes han necesitado este tiempo para identificar a todos los proveedores y los puntos de distribución, sobre todo saunas y sex-shops. También necesitaron informes de la Dirección General de Farmacia para demostrar que se trata de una sustancia perjudicial para la salud.
La zona de Chueca fue una de las más registradas. Los agentes, apoyados por efectivos de la Policía Judicial, entraron en establecimientos de las calles de la Montera, Barco y Mejía Lequerica, según fuentes del caso. En la mayoría de los lugares, los agentes levantaron actas de incautación del producto. En los locales donde había mayor abundancia de botes de poppers se detuvo a los encargados o los dueños de las saunas y los sex-shops. Diez detenidos en total. Fueron trasladados a la Comandancia de la Guardia Civil en Tres Cantos, excepto los arrestados en la nave de Getafe. "En algunos sex-shops hemos encontrado uno o dos botes muy bien escondidos, mientras que en otros locales se ha incautado bastante cantidad", señalaron fuentes judiciales.
Los investigadores tenían previsto hacer las detenciones antes de la celebración del Orgullo Gay, organizado el pasado fin de semana, pero decidieron aplazarlo ante la avalancha de visitantes que había en la capital. En esas fechas, muchos locales aumentaron las existencias de poppers, ya que es un producto muy solicitado en determinadas prácticas sexuales.
Un centenar de agentes
Un juzgado de Collado Villalba dio los permisos para que los agentes entraran en los distintos establecimientos y, en especial, en las dos naves industriales. En la redada intervino cerca de un centenar de agentes, ya que en algunos municipios, como en Móstoles, también participaron policías locales.
Los arrestados serán acusados de un delito contra la salud pública, ya que supuestamente han vendido un estupefaciente peligroso para las personas. Fuentes judiciales indicaron que la mayoría de los detenidos pasarán hoy a disposición del titular del juzgado de guardia. Será éste quien decidirá si ingresan en prisión o son puestos en libertad.
