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Fuente: El Comercio.
Sociedad
Fiesta gay con mensaje europeo
La celebración del Día del Orgullo en Asturias sirvió para reclamar la igualdad en toda la UE
Fiesta gay con mensaje europeo
La celebración del Día del Orgullo en Asturias sirvió para reclamar la igualdad en toda la UE
29/06/2007 - IKER CORTÉS / GIJÓN
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Las calles de Gijón se convirtieron ayer en pura fiesta a ritmo de tambores, silbatos y el movimiento constante de las banderas multicolor, símbolo del colectivo homosexual. Todo, a pesar de que el coordinador de Xente Gai Astur (Xega), Tino Brugos, reconocía, minutos antes de la manifestación que recorrió el camino que separa el Antiguo Instituto de los Jardines de Begoña (por la calle de Covadonga), que la asistencia de público era «menor que la del año pasado». Cientos de personas, algo menos de 500 según la organización, se manifestaron ayer en Asturias para reclamar la igualdad en toda Europa en lo que respecta a los derechos de gais, lesbianas, transexuales y bisexuales.
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Las calles de Gijón se convirtieron ayer en pura fiesta a ritmo de tambores, silbatos y el movimiento constante de las banderas multicolor, símbolo del colectivo homosexual. Todo, a pesar de que el coordinador de Xente Gai Astur (Xega), Tino Brugos, reconocía, minutos antes de la manifestación que recorrió el camino que separa el Antiguo Instituto de los Jardines de Begoña (por la calle de Covadonga), que la asistencia de público era «menor que la del año pasado». Cientos de personas, algo menos de 500 según la organización, se manifestaron ayer en Asturias para reclamar la igualdad en toda Europa en lo que respecta a los derechos de gais, lesbianas, transexuales y bisexuales.
Ponía la música Alaska, con su 'A quién le importa', y la marcha, el colectivo Tribadas, que además de ocuparse de la percusión, gritaba a los cuatro vientos lemas de lo más sorprendentes: 'Sí somos finas, estamos seguras', 'Vente, vente, vente, a la acera de enfrente', 'No puedo tener novia, yo vivo en Varsovia'.
De esta manera, se hacían eco de una de las reivindicaciones de la jornada, incluida en el manifiesto que cada año confecciona Xega: el hecho de que en algunos países de la Europa del Este, como Polonia, Letonia y Rumanía, se esté «consolidando la homofobia», explicó Brugos. En este sentido, «España es uno de los países de los que Europa debería seguir el modelo, si los políticos quieren seguir avanzando en lo que respecta a los derechos sociales». Y acabó exigiendo actuaciones contra gobiernos como el polaco. «No toleraremos un paso atrás».
La jornada también sirvió para entregar los premios. El triángulo rosa, que reconoce a las personas que han puesto de su parte para que el colectivo avance en cuanto a sus derechos, lo recogió María Fernández, en representación de la Unidad de Tratamiento de Identidad del Hospital de San Agustín, a la que pertenece. «Estamos muy contentos de trabajar en algo que es la consecución de un derecho», explicó al subir al escenario del Antiguo Instituto. Quien no apareció por allí fue Gustavo Bueno, galardonado con la cruz, o sea el ladrillo rosa por unas declaraciones en las que aseguró que un Gobierno que permitiera el matrimonio de los homosexuales debía ser derrocado.
Asistieron al acto, la alcaldesa de Gijón, Paz Fernández Felgueroso; la consejera de Vivienda y Bienestar Social, Laura González, y la responsable del Instituto de Atención a la Infancia, Gloria Fernández.
