Registro Civil Buenos Aires deniega cita para contraer matrinonio a lesbianas
Buenos Aires, 14 feb (EFE).- El Registro Civil de Buenos Aires
denegó hoy una cita para contraer matrimonio a dos lesbianas que han
asegurado que llevarán hasta las máximas instancias judiciales su
reclamación para convertirse en pareja legal.
"De ser necesario recurriremos a la Corte Suprema de Justicia y
hasta la Corte Interamericana de Derechos Humanos", dijo María
Rachid, que preside la Federación Argentina de Lesbianas, Gays,
Bisexuales y Transexuales (FALGTB).
Rachid se presentó hoy con su pareja, Claudia Castro , en la sede
del Registro Civil de la capital del país para solicitar una cita
para contraer matrimonio, pero una autoridad del organismo no
accedió a la petición.
"Nos dijeron que más allá del derecho que teníamos de casarnos,
la legislación no lo permite", indicó María Rachid a los periodistas
antes de dirigirse a la sede de los tribunales para presentar un
recurso de amparo por inconstitucionalidad de la ley de matrimonios.
En 2003, y después de varios años de discusión, Buenos Aires se
convirtió en la primera ciudad de Latinoamérica en aprobar una ley
de uniones civiles entre personas del mismo sexo.
Los beneficios de esta norma, que luego se extendió a algunas
otras ciudades del país, incluyen el acceso de las parejas a la
seguridad social, la solicitud de préstamos bancarios y el derecho a
días de permiso en caso de enfermedad o fallecimiento, entre otros.
"Pero la unión civil, que ya hemos concretado, tiene un alcance
muy limitado geográficamente y en cuanto a derechos", sostuvo
Rachid.
"Queremos contraer matrimonio y tener los mismos derechos que el
Estado les reconoce a las parejas heterosexuales, con los mismos
nombres. Lo contrario es un acto discriminatorio", apuntó.
Rachid y Castro, que conviven desde hace siete años, acudieron a
la sede del Registro Civil con testigos, un escribano y la
presidenta del Instituto Nacional contra la Discriminación, la
Xenofobia y el Racismo (INADI), María José Lubertino, quien apoya a
la pareja en su reclamación. EFE