Un día después de que el portavoz del episcopado admitiera que el condón puede contribuir a frenar el sida, la Conferencia Episcopal Española emitió un comunicado de rectificación para defenestrar los profilácticos. "No es posible aconsejar el uso del preservativo por ser contrario a la moral de la persona. Lo único verdaderamente aconsejable es el ejercicio responsable de la sexualidad, acorde con la norma moral", dice la nota. "No es cierto que haya cambiado la doctrina de la Iglesia sobre el preservativo", añade. El pasado martes, el portavoz y secretario general del episcopado, Juan Antonio Martínez Camino, mantuvo un encuentro sin precedentes con la titular de Sanidad, Elena Salgado, para hablar del sida, un asunto que "preocupa mucho a la Iglesia y los católicos", según la jerarquía eclesiástica. Tras la entrevista, Martínez Camino explicó a los periodistas que los condones "tienen su contexto en una prevención integral y global del sida".
(jueves 20 de enero de 2005)
XORNAL I Madrid.- El portavoz de los obispos se escudó en la prestigiosa revista The Lancet, que el pasado mes de noviembre publicó un informe que aseguraba que el mejor método para combatir el VIH es una combinación de tres elementos: abstinencia, fidelidad y condones (ABC, en sus siglas en inglés), explica El Periódico de Cataluña.
Las declaraciones de Martínez Camino cosecharon el aplauso de los partidos de izquierda, los homosexuales y los teólogos progresistas. Sin embargo, levantaron ampollas en algunos influyentes movimientos ultraconservadores, como el Opus Dei. También el Vaticano mostró su malestar. Uno de los primeros en desautorizar las palabras del portavoz de los obispos españoles fue el secretario del consejo pontificio de la salud, José Luis Redrado Marchite, que declaró que los preservativos son "un método que la moral católica rechaza y condena".
Marchite añadió que los condones son una solución "más fácil que la abstinencia" y admitió que ésta puede ser "traumática" para algunas personas. "Sin embargo los católicos tienen que ser coherentes con su fe". En la misma línea, el cardenal Javier Lozano Barragán añadió que la mejor prevención contra el sida es "la castidad".
Tras el revuelo organizado, la oficina de prensa del episcopado español emitió a última hora de la tarde un comunicado, en el que la jerarquía estuvo trabajando casi todo el día. Ya por la mañana, el arzobispo de Toledo, Antonio Cañizares, anunció una rectificación.
Según el comunicado, durante la entrevista del martes, Martínez Camino explicó a la ministra de Sanidad que la postura de la Iglesia "no está alejada de las recomendaciones científicas" para combatir la pandemia, con la que conviven más de 39 millones de personas en el mundo.
El portavoz de los obispos recordó el método ABC publicado en The Lancet y aseguró que la Iglesia "colabora en la prevención del sida promoviendo la educación de las personas para el amor conyugal fiel, tratando de evitar las relaciones indebidas", publica El Periódico de Cataluña.