12-09-2006
El ex presidente reformista de Irán, Mohamed Jatami, respondió a las preguntas de estudiantes norteamericanos de la Kennedy School of Government, y una de ellas tocó uno de los temas más sensibles: las ejecuciones de homosexuales por parte del regimen iraní.
Y Jatami, presidente del país de 1997 a 2005, considerado como uno de los representantes del sector aperturista de la oscura clase política iraní -imaginemos cómo son los demás-, justificó sin reparos la represión de los homosexuales, si bien no quiso entrar en si la pena de muerte es el castigo adecuado.
“Como experto en Ciencias Islámicas (sic), puedo decir que la pena capital está aceptada por el Islam, aunque las condiciones para su aplicación son tan estrictas que las ejecuciones, en la mayoría de casos, no tendrían que llevarse a cabo. En la mayoría de países islámicos las relaciones homosexuales, como las heterosexuales no aceptadas, son castigables […] Los actos homosexuales son un crimen en Irán… y los crímenes son castigables… El hecho de que estos crímenes deban ser castigados con la pena de muerte puede ser debatible“, declaró.
Unas declaraciones que justifican las tropelías y crímenes contra los Derechos Humanos cometidos por el regimen iraní en los últimos años, y que pretenden avalar los excesos del actual presidente, el ultraconservador Mahmud Ahmadineyad.