El líder provincial de los populares en Valencia se opone a cualquier directriz contra las uniones. La dirección regional recuerda la posición del partido en Madrid
J. L. G., Valencia
Ha sido difícil encontrar una posición unitaria en el Partido Popular en un tema como los matrimonios gays, que quema en las manos de la derecha. Tras la revelación de al menos seis casos en que alcaldes del PP de la Comunitat han oficiado bodas entre homosexuales en aplicación de la ley que entró en vigor en julio de 2005, el discurso ha bailado entre el respeto a una ley aprobada y la lealtad a un partido que mantiene un recurso de inconstitucionalidad contra la norma.
Quien más claramente ha tomado una postura, como suele ser habitual, es el presidente provincial del PP en Valencia y alcalde de Xàtiva, Alfonso Rus, al señalar que se trata de «personas como otras», [en referencia a los homosexuales] y que como tal «hay que respetarlos». Del mismo modo, Rus señaló que en su localidad aún no ha recibido ninguna petición, y afirmó que no existen directrices en el partido sobre el oficio de este tipo de uniones. «Y si la hubiera, diría que por qué», señaló Rus a este periódico.
Por su parte, la dirección regional se manifestó de forma oficialista, y señaló que la «línea que sigue el partido es la misma que ha marcado Génova», lo que supone admitir de soslayo las declaraciones de Gabriel Elorriaga, portavoz del PP, que calificó de «incoherente» la postura del alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, tras casar a un militante del PP el último fin de semana de julio.
En la misma línea, el portavoz del grupo popular en las Corts, Serafín Castellano, manifestó que su grupo se mantiene en los criterios que ha manifestado el partido a nivel nacional. «Estamos con lo que dice el partido», afirmó. ¿Quiere decir eso que se considera «incoherente» que un alcalde case a gays? «Quiere decir que en los que afecta a sentimientos religiosos, la libertad es importante y la persona está por delante. Pero es una opinión personal», expresó el portavoz.
Lo cierto es que las dos sensibilidades que conviven en el PP a nivel nacional, con los casos de Gallardón o la ex ministra Celia Villalobos más receptivos a la ley, y otra línea representada por Ángel Acebes y Gabriel Elorriaga, son más difusos en la Comunitat. Diversas fuentes del partido señalaron que la participación de al menos seis alcaldes en ceremonias de uniones de homosexuales no ha sentado especialmente mal. Sobre todo por la discreción con que se ha manejado el tema, a diferencia de la «exhibición» que realizó Gallardón, sacando a la pareja al balcón. De hecho, los alcaldes y concejales del PP habrían encontrado en la discreción el punto de encuentro entre el respeto a la ley y los derechos de los homosexuales, y la oposición realizada en el Congreso ante esta ley.