¿Ataque a los gays o control rutinario?
El presidente de la Mesa pola Normalización acusa a dos policías de maltrato contra él y su novio
Carlos Callón, presidente de la Mesa pola Normalización, ha presentado denuncia contra la Policía Local por presuntos malos tratos a él y su novio ·· Los efectivos de seguridad insisten en que tan sólo fue llevado hasta la Comisaría para cotejar su documentación
REDACCIÓN • SANTIAGO
Lo que para unos era simplemente un control de seguridad rutinario, se convirtió para otros en un ataque contra los derechos fundamentales con tintes homófobos. El incidente se producía en la madrugada del sábado al domingo a las puertas de un conocido local de ambiente del Casco Histórico. En torno a las 5.30 de la madrugada, Carlos Callón, presidente de A Mesa pola Normalización Lingüística, salía del pub con su pareja y presenciaba cómo una patrulla identificaba a un grupo de jóvenes. "¡Ojo! Son gays... El problema es que os gusta mi compañero". Al escuchar esta sentencia, que según el denunciante pronunció uno de los agentes, se acercó para pedirle explicaciones y, supuestamente, exigir que mostrase su placa, siempre "con absoluta educación".
Aunque la Policía Local niega los hechos e insiste en que se trataba tan sólo de un control rutinario, Carlos Callón señala que el guardia optó, presuntamente, por agarrarle con fuerza, zarandearle y solicitarle el DNI. "Me metieron en el furgón y me llevaron a Comisaría. En la furgoneta me mantuvieron incomunicado como si acabase de cometer un delito. Ni siquiera me dejaron hablar con mi novio", señaló el demandante. Una vez en Comisaría, procedieron a identificarle y le dejaron abandonar las dependencias policiales. "Nunca me había pasado esto. Soy consciente de que la mayor parte de los agentes no adoptan este tipo de actitudes, ni vulneran nuestros derechos", sentencia. "Me siento mal por el trato recibido. Además, estos comportamientos perjudican la imagen de la ciudad. Esto no es normal".
Carlos Callón ya ha presentado en Comisaría la denuncia correspondiente, respaldada por un informe médico de lesiones.
Por su parte, el concejal de Seguridad Ciudadana alega que fue el joven quien "increpó a los agentes". La Policía se desplazó hasta la rúa Travesa a raíz de una queja vecinal, ya que en un inmueble de la zona se estaba celebrando una fiesta que molestaba a los que querían descansar. Primero se desplazó una patrulla para desalojar el piso denunciado, explica Baqueiro, y a continuación se trasladó hasta la zona otro furgón policial.
Después de "increpar a los agentes", se procedió a su identificación, siguiendo el protocolo habitual. Como no tenía en su poder la documentación requerida, se trasladó al joven demandante a Comisaría.