Por Mario Alberto Reyes – (Agencia NotieSe)
Habían transcurrido seis años desde que el nadador canadiense Mark Tewksbury tuviera una de las actuaciones más importantes de su carrera deportiva. La obtención de una medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992, lo colocó como uno de los grandes triunfadores de aquella justa mundial.
Arduos entrenamientos constituyeron el camino de Tewksbury hacia la dorada presea, sin embargo, tuvo que esforzarse más que el resto de sus compañeros debido a que pensaba que sólo de esta manera no se percatarían de su preferencia por las personas de su mismo sexo.
Para el atleta su condición homosexual implicaba el riesgo de ser expulsado del equipo nacional de natación y convertirse en objeto de burlas y desprecios por parte de su entrenador, amigos, familiares y el resto de nadadores.
Agobiado por tener que practicar un estilo de vida que cumpliera con los requerimientos socialmente impuestos, Tewksbury decidió hacer pública su orientación sexual en 1998. Desde entonces es un férreo promotor de los derechos humanos y políticos de quienes forman parte del colectivo lésbico, gay, bisexual, transgénero (LGBT).
Actualmente el ex campeón olímpico es el copresidente de los Out Games, evento deportivo en el que participarán aproximadamente 16 mil atletas de varias partes del mundo, y que se efectuarán en Montreal, Canadá del 29 de julio al 5 de agosto próximos. Sobre este tema versó la charla que NotieSe tuvo con Mark durante su reciente visita a México para promover la asistencia de deportistas mexicanos al país de la hoja de maple.
¿Qué son los Out Games?
Son una iniciativa deportiva en la que están involucrados gobierno, empresarios y sociedad civil. Se trata de la primera edición de una competencia ideada para atletas homosexuales, aunque podrán participar personas que no formen parte del colectivo de la diversidad sexual.
La primera edición de este tipo de pruebas fue en la ciudad de Los Ángeles en 1982 y se llamaron Gay Games. Fueron creados por Tom Wadell, atleta que obtuvo el sexto lugar dentro de la prueba de decatlón en los Juegos Olímpicos de México 1968. Sin embargo, debido a problemas ideológicos acerca de cómo utilizar el evento para dar a conocer las demandas del colectivo LGBT, surgió la idea de organizar los Out Games, que a diferencia del evento predecesor, incluirá conferencias y actividades relacionadas con la defensa y promoción de los derechos humanos.
¿Cuál es la principal aportación de los Out Games al colectivo LGBT del mundo?
Hay muchos gays en varias ramas del deporte, pero son incapaces de decirlo porque profesionalmente persiste la discriminación. Esta es una forma en la que se puede enseñar o mostrar que un deportista homosexual es igual de bueno que uno heterosexual, pues la orientación sexual no nos hace mejores ni peores. Ante todo somos profesionales. Se trata de promover el respeto para toda la gama de la diversidad sexual.
Desde 1982 hemos luchado porque se respete a los deportistas gays y hay avances notables. Una muestra es la confianza que inversionistas y gobiernos nos han externado para organizar los juegos de Montreal. Durante los 10 días que durará el evento podemos garantizar una gran fiesta en la que conviviremos gays, lesbianas, transexuales y heterosexuales, en la que manifestaremos le necesidad de elaborar leyes en muchos países que respalden el ejercicio de nuestros derechos.
¿El origen de estos juegos fue la homofobia?
Por supuesto, porque el deporte profesional está muy cerrado para quienes no somos heterosexuales. Pero los de Montreal están abiertos para quien quiera participar. Muchos deportistas no son gays pero simpatizan con nuestras exigencias deportivas, políticas y sociales, además de que respetan nuestra forma de vida.
Los Out Games son un evento deportivo incluyente en los que podrá participar quien así lo decida. Sólo se requiere ser un atleta de alto rendimiento y tener o conseguir recursos económicos para el traslado y estancia en Canadá.
¿Existen planes para llevar estos juegos a Latinoamérica?
Sí, de hecho estamos en negociaciones con las autoridades de Brasil para que en 2013, la edición de los Out Games se lleve a cabo en Sao Paulo. Mientras tanto, la próxima sede ya está confirmada, Copenhague, capital de Dinamarca, será la ciudad que albergue a estos juegos en 2009.
Uno de los factores que influyen en la elección de las sedes consiste en garantizar la rentabilidad de los juegos, porque a diferencia de los Gay Games, que en cada una de sus tres últimas ediciones ha arrojado pérdidas cercanas al millón de dólares, la estrategia elaborada por quienes somos los organizadores de los Out Games se basa en confirmar la asistencia de 16 mil atletas y poco más de 200 mil visitantes dispuestos a gastar su dinero en Montreal para recuperar el monto de la inversión realizada que fue de 18 millones de dólares.
Finalmente, ¿cuál es el mensaje principal de este evento?
Es una jornada deportiva dirigida a todas aquellas personas que quieran participar no importando su orientación sexual. Deseamos que los Out Games se conviertan en un referente positivo acerca de las actividades del colectivo LGBT que permitan cambiar la idea de que los gays sólo estamos dispuestos a participar en fiestas y relaciones sexuales.
Las y los deportistas mexicanos que deseen participar pueden contactarse con Mario Velázquez en la ciudad de México al 044 55 54 01 32 98 o accesar a la página
www.montreal2006.org