Una imagen de 'Luciérnagas', de la directora iraní Bani Khoshnoudi. (Phoenix Entertainment Group)
Por: Eulàlia Iglesias
El puerto de la ciudad mexicana acoge tres personajes en tránsito en un sensible drama que actualiza los imaginarios del exilio en el cine
La trayectoria vital y profesional de la directora Bani Khoshnoudi cruza tantas fronteras como el protagonista de este su segundo largometraje, 'Luciérnagas'. Nacida en Irán, creció en Texas después de que su familia decidiera emigrar a Estados Unidos huyendo de la inestabilidad política en su país de origen. Después estudió y trabajó en Europa, pero acabó recalando en México, donde vive desde hace una década y donde tiene lugar su película. Este tránsito transnacional marca también 'Luciérnagas', un drama sensible y muy contemporáneo en su concepción de las identidades como algo fluctuante.
El filme se centra en un joven iraní que acaba en Veracruz, como un náufrago en una isla, después de colarse de polizonte en un carguero en Turquía con la intención de llegar a algún otro sitio. Como la directora, Ramin (Arash Marandi) huye de su tierra por cuestiones políticas. Es gay y su objetivo es reunirse con su novio en algún lugar donde no les persigan por su orientación sexual. Varado en Veracruz, Ramin se da cuenta de que no puede ni regresar al sitio de donde proviene (las mafias de la migración cobran demasiado dinero y además es peligroso) ni programar por el momento una nueva huida a un destino mejor. Mientras se mantiene en contacto por Skype con su pareja, el joven empieza a acomodarse a su nuevo estatus de desplazado en una ciudad portuaria.
Tráiler de 'Luciérnagas'
Khoshnoudi retrata una Veracruz alejada de los tópicos turísticos, aunque su famoso carnaval acaba reclamando un cierto protagonismo. En 'Luciérnagas', la ciudad mexicana se convierte en uno de esos entornos que conforman el tono de la película e influyen en el devenir de su protagonista. Su condición portuaria resulta determinante. En el mundo global del siglo XXI, un puerto no supone tanto un punto de llegada como un territorio de tránsito, un lugar de residencia temporal en el que sin embargo los personajes acaban estableciéndose más tiempo del esperado. La formación en el documental de la directora se nota en el talento y la profundidad con que capta esta localización realista. Pero al mismo tiempo el filme rehúye caer por inercia en la estética del reportaje o en los tópicos de la ficción realista en torno a migrantes. Quedan claras las condiciones en que viven y trabajan los hombres que gravitan en torno al puerto de Veracruz. Pero Khoshnoudi no se recrea en la estética del miserabilismo y convierte este contexto de dureza en un terreno donde florecen relaciones inesperadas entre los diferentes personajes.
Porque Ramin acaba entablando vínculos con otras dos personas que a su manera se encuentran tan desubicadas como él. Por un lado conecta con Leti (Flor Edwarda Gurrola), la encargada de la pensión donde se hospeda, que siempre le ha dispensado un trato amable y le da clases de español. Como el joven, Leti también se encuentra en una etapa de replanteamiento de su vida, sobre todo a partir del retorno de Ernesto (Eduardo Mendizábal), su antigua pareja, que emigró en este caso a Estados Unidos con alguna vaga promesa de futuro común. Cuando Ernesto vuelve a México, queda claro que ha rehecho su vida sin Leti, una mujer que se encuentra en esa edad en que se supone ya no puedes disfrutar de la vida si no tienes familia propia.
Por el otro, el protagonista también desarrolla una relación intensa con Guillermo (Luis Alberti), uno de sus colegas en los trabajos que encuentra en torno al puerto, donde coinciden sobre todo hombres de procedencias diversas que intentan llegar a Estados Unidos. El chico también huye de un pasado en el seno de un banda criminal en El Salvador y sueña con instalarse en el país vecino para emprender una nueva vida. A su manera, Guillermo encarna ya desde su apariencia cierta idea de masculinidad tradicional, con sus aires de chico duro y violento que habría intentado reafirmar su identidad en una mara. El vínculo con Ramin contribuirá a que Guillermo deje atrás este aspecto más tóxico y opresivo de su rol masculino.
Khoshnoudi dispensa a estos dos personajes secundarios que acompañan a Ramin el mismo trato que si fueran principales y les otorga por tanto su propio arco dramático. La interrelación entre tres personas de procedencias, edades y trayectorias vitales diferentes y la capacidad de la directora de generar un paisaje emocional a partir de un contexto geográfico muy concreto contribuyen a convertir 'Luciérnagas' en una película que revisa y actualiza con atino el cine sobre las migraciones.
La ciudad portuaria es una localización propicia a las narrativas en torno al tránsito, los refugiados y la transnacionalidad. Pero 'Luciérnagas' no pone en crisis solamente el concepto de identidad nacional. El filme expande el cuestionamiento de las categorías clásicas a los roles e identidades de género, y a la orientación sexual. El espacio del tránsito se acaba convirtiendo así en el contexto propicio para reencontrarse a uno mismo.
Fuente:https://www.elconfidencial.com/cultu...rHKsPcD8iRlBEb RzFXhL8pgWbxiwssU8