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EL PERIÓDICO DE CATALUÑA, 13/02/06
EL ACTOR TUVO RELACIONES SEXUALES CON ARTISTAS DE AMBOS SEXOS, ENTRE ELLOS, LEONARD BERNSTEIN, JAMES DEAN, AVA GARDNER Y EDITH PIAF
Un libro revela que Marlon Brando fue amante de Burt Lancaster
 
BEGOÑA ARCE
LONDRES
Antes de que la calvicie le restara lustre y los kilos deformaran su cuerpo, Marlon Brando sedujo desde la pantalla a millones de corazones con su belleza de dios griego. Las numerosas conquistas femeninas de la que fue una de las más grandes estrellas de Hollywood fueron bien aireadas por la prensa de la época. Hubo, sin embargo, otra lista secreta de amantes masculinos, silenciada hasta ahora.
Brando Unzipped (Brando al descubierto), un libro de Darwin Porter a punto de salir en el mercado anglosajón, desvela los nombres de artistas bien conocidos, de ambos sexos, que tuvieron relaciones íntimas con Brando, como su colega Burt Lancaster.
En los primeros extractos de la obra, publicados ayer por el dominical británico The Sunday Times, se incluye entre los seducidos por el actor a mitos del séptimo arte como aquel gran duro que fue Lancaster, los shakesperianos británicos Laurence Olivier y John Gielgud, el dulce Tyrone Power, el joven y hermoso James Dean y el torturado Montgomery Clift. A la lista masculina de amantes, Porter añade al compositor Leonard Bernstein.
Las mujeres que claudicaron ante su magnetismo no es menos impresionante. Maravillas como Ava Gardner, Marilyn Monroe, Ingrid Bergman, Anna Magnani o la cantante francesa Edith Piaf se alternaron en la cama de Brando con sus colegas masculinos.
A la bomba sexual que fue Marilyn Monroe la conoció en 1946, cuando ambos eran desconocidos. El encuentro tuvo lugar en un bar de Nueva York, la ciudad donde él estudiaba para ser actor. Según Porter, el joven aspirante a estrella le ofreció a la rubia curvilínea 15 dólares a cambio de llevársela un rato al apartamento de alquiler en el que vivía. "Yo negociaba un desayuno, un almuerzo o una cena, según la hora del día", afirmaría más tarde Marilyn, reconociendo haberse acostado con desconocidos para poder comer en los tiempos difíciles.
La obra desvela también el nombre de otro actor, Wally Cox, que habría sido el gran amor de juventud de Brando. Cox murió en 1973 y la estrella conservó las cenizas hasta su fallecimiento, a los 80 años, en julio del 2004. Fue entonces cuando, por deseo suyo, las cenizas de ambos amantes se juntaron y fueron esparcidas por Tahití y por el Valle de la Muerte en California.
Atormentado, posesivo, violento, eternamente insatisfecho, el actor vivió traumáticamente su sexualidad y su popularidad. Llegó a perder todo interés por el cine, al que sólo retorno ocasionalmente durante las últimas décadas de su vida.
Ni siquiera llegó a sentirse orgulloso de algunas de sus actuaciones memorables como en La ley del silencio, de Elia Kazan, o en El Padrino, de Coppola. Su vida privada estuvo también sembrada de escándalos y dramas. Uno de sus hijos mató al novio de su hija Cheyenne, que acabó suicidándose.
EL ACTOR TUVO RELACIONES SEXUALES CON ARTISTAS DE AMBOS SEXOS, ENTRE ELLOS, LEONARD BERNSTEIN, JAMES DEAN, AVA GARDNER Y EDITH PIAF
Un libro revela que Marlon Brando fue amante de Burt Lancaster
 
BEGOÑA ARCE
LONDRES
Antes de que la calvicie le restara lustre y los kilos deformaran su cuerpo, Marlon Brando sedujo desde la pantalla a millones de corazones con su belleza de dios griego. Las numerosas conquistas femeninas de la que fue una de las más grandes estrellas de Hollywood fueron bien aireadas por la prensa de la época. Hubo, sin embargo, otra lista secreta de amantes masculinos, silenciada hasta ahora.
Brando Unzipped (Brando al descubierto), un libro de Darwin Porter a punto de salir en el mercado anglosajón, desvela los nombres de artistas bien conocidos, de ambos sexos, que tuvieron relaciones íntimas con Brando, como su colega Burt Lancaster.
En los primeros extractos de la obra, publicados ayer por el dominical británico The Sunday Times, se incluye entre los seducidos por el actor a mitos del séptimo arte como aquel gran duro que fue Lancaster, los shakesperianos británicos Laurence Olivier y John Gielgud, el dulce Tyrone Power, el joven y hermoso James Dean y el torturado Montgomery Clift. A la lista masculina de amantes, Porter añade al compositor Leonard Bernstein.
Las mujeres que claudicaron ante su magnetismo no es menos impresionante. Maravillas como Ava Gardner, Marilyn Monroe, Ingrid Bergman, Anna Magnani o la cantante francesa Edith Piaf se alternaron en la cama de Brando con sus colegas masculinos.
A la bomba sexual que fue Marilyn Monroe la conoció en 1946, cuando ambos eran desconocidos. El encuentro tuvo lugar en un bar de Nueva York, la ciudad donde él estudiaba para ser actor. Según Porter, el joven aspirante a estrella le ofreció a la rubia curvilínea 15 dólares a cambio de llevársela un rato al apartamento de alquiler en el que vivía. "Yo negociaba un desayuno, un almuerzo o una cena, según la hora del día", afirmaría más tarde Marilyn, reconociendo haberse acostado con desconocidos para poder comer en los tiempos difíciles.
La obra desvela también el nombre de otro actor, Wally Cox, que habría sido el gran amor de juventud de Brando. Cox murió en 1973 y la estrella conservó las cenizas hasta su fallecimiento, a los 80 años, en julio del 2004. Fue entonces cuando, por deseo suyo, las cenizas de ambos amantes se juntaron y fueron esparcidas por Tahití y por el Valle de la Muerte en California.
Atormentado, posesivo, violento, eternamente insatisfecho, el actor vivió traumáticamente su sexualidad y su popularidad. Llegó a perder todo interés por el cine, al que sólo retorno ocasionalmente durante las últimas décadas de su vida.
Ni siquiera llegó a sentirse orgulloso de algunas de sus actuaciones memorables como en La ley del silencio, de Elia Kazan, o en El Padrino, de Coppola. Su vida privada estuvo también sembrada de escándalos y dramas. Uno de sus hijos mató al novio de su hija Cheyenne, que acabó suicidándose.
